La sala de exposiciones José Angel Valente, antiguo Banco de España, acoge 25 piezas artísticas procedentes de los fondos propios que tiene el Museo Municipal. Una muestra para conocer a los artistas ourensanos
La sala invita a ser recorrida con calma tras haber dejado atrás, en la puerta automática de la entrada, toda preocupación y malestar. Una mente en blanco dispuesta a atrapar emociones y a dejar fluir sensaciones es el mejor ropaje que se puede usar para mirar y ver las obras que forman ahora parte de las paredes de la sala de exposiciones José Angel Valente, antiguo Banco de España.
Se trata de una selección de obras que pertenecen a los fondos que acoge el Museo Municipal. Pintura y escultura se dejan abrazar a lo largo de este espacio con 25 piezas que ya forman parte de la historia del arte de la ciudad. Con 25 piezas que reúnen y unen de nuevo a viejos amigos. 25 piezas en las que la inmortalidad ha salido victoriosa sobre la muerte, ya que vivan o no los artistas, las obras que han dejado han demostrado qué es eso de la inmortalidad que tanto repetía el pintor Xaime Quessada.
Precisamente es su obra de gran formato "A miña casa", del año 1968, la que primero se asoma una vez superadas las escaleras de la entrada. Y allí, a uno de los lados, manteniendo la especial relación que siempre los unió, un cuadro grande del año 1988 del pintor Alexandro, donde una silueta con sombrero se cobija de la lluvia. Así los dos amigos vuelven a estar más cerca.
La exposición mezcla épocas y estilos, haciendo que estas 25 piezas formen un conjunto extraño que define a la perfección cómo han sido las últimas décadas creativas de esta ciudad.
Las obras llevan las firmas de escultores que, en algún momento también ejercieron de pintores, y de pintores que, por curiosidad, en algún instante probaron la escultura. Pero aquí nada está revuelto. Cada uno en su sitio.
Antonio Quesada, Carlos Vello, Xurxo Oro Claro, Prego de Oliver, Antón Pulido, Acisclo Manzano, Arturo Baltar, Aurelio Iglesias, Buciños, Carlos Bóveda, Conde Corbal, Ignacio Basallo, Laxeiro, Luis Trabazo, Moncho Borrajo, Paco Pestana, Ramón Conde, Xavier Pousa, Xosé Cid, Xosé Luis de Dios, Alexandro, Xaime Quessada, Vidal Souto , Conde Corbal y Virxilio, son los nombres que componen este mosaico de mundos diferentes, épocas distintas, materiales variados. Los conjuntos escultóricos resultan reconocibles, llevan la huella de sus autores como firma imborrable. El cuadro de Conde Corbal representa a un importante grupo de personas de la cultura gallega en el entierro de Don Ramón Otero Pedrayo, y está ubicado en la entrada de la Catedral que sale a la calle Lepanto. Las obras expuestas deben ser observadas sin prisas, y mejor sin leer, al principio, ningún cartel informativo, para absorver las sensaciones sin prejuicios.
La muestra estará durante todo el verano. De martes a domingo, de 11 a 13,30 horas, y por las tardes, de 18,30 a 21,30 horas, excepto sábado y domingo.
