ENTREVISTA

“Nadie pensaba en que había mujeres que no eran felices casándose"

El próximo jueves 31, Loly Villoch estrena en el Museo Municipal de la ciudad "Metauniversos cotidianos", una serie fotográfica cuya protagonista es Rosa, una muñeca que hace frente a un marido ausente en casa y con sus hijos

La fotografía forma parte de la vida de Loly Villoch (A Coruña, 1978) desde que era pequeña: acompañaba a su padre durante el revelado analógico, algo "mágico" en aquel entonces. Con 9 años empleó su primera cámara y, desde ahí, se quedó con ella. Más tarde llegaría la formación artística con fotógrafos como Alberto García-Alix, los proyectos y las exposiciones. El próximo jueves 31, Villoch estrena en el Museo Municipal de la ciudad "Metauniversos cotidianos", una serie fotográfica cuya protagonista es Rosa, una muñeca que hace frente a un marido ausente en casa y con sus hijos. 

¿Qué hay detrás de las imágenes de este proyecto?

Intento invitar a los espectadores a realizar una reflexión, más o menos profunda, acerca del papel tradicional de la mujer, así como del mito del amor romántico y los estereotipos de que la mujer se tenía que casar y tener hijos. Nadie se planteaba que a lo mejor había muchas personas a las que eso no las iba a hacer felices. 

La exposición incluye más que fotografías.

Sí, hay varios carteles con datos que también incitan a esa reflexión. Por ejemplo, sobre quién hace el trabajo doméstico, y aparecen cosas muy curiosas, como que es la mujer la que realiza el 70% de estas tareas, tanto si trabaja como si no, y solo si el marido no trabaja, entonces se reparten más o menos al 50%. 

¿Por qué muñecos en vez de personas de carne y hueso?

Quería hacer ese juego de cambios de espacios, con muebles y ropas de diversas épocas, que simboliza que todas estas situaciones se han repetido en el tiempo. Además, no quería desviar la atención con modelos reales, ni tampoco personalizarlo en alguien. 

¿Qué siente Rosa?

Al principio es una niña con muchas inquietudes, pero llega un momento en el que descubre que, como mujer, tendrá oportunidades muy diferentes a las de un hombre, y que si se sale de lo socialmente aceptado será destruida. Se enamora, se casa y tiene hijos y luego se da cuenta de que su marido no se implica en su proyecto en común como a ella le gustaría. Ahí llega a un punto de inflexión, esa sensación de sentirse tan agobiada que tiene que romper con la situación.

¿Quién es ella?

Escogí ese nombre porque es el color que tradicionalmente se asocia a las mujeres, además de ser algo personal, ya que es el nombre de mi bisabuela. Las imágenes reflejan experiencias de gente que me encontrado a lo largo de mi vida, así como de mi familia. 

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