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La ola de calor, con más de 40 grados, abarrota las riberas del Miño, termas y piscinas

OURENSE. 18.06.2017 PISCINAS DE MONTERREI. AFORO COMPLETO FOTO: MIGUEL ANGEL
photo_camera Más de 2.300 personas pasaron en el día de ayer por el complejo deportivo de Monterrei, con un aforo para 2.100 usuarios (M. ÁNGEL).

La máxima de la provincia se registró en Vilamartín, con 40,8 grados, seguida de la ciudad, con 40,3. Pese a las altas temperaturas, muchos ourensanos no renuncian al agua caliente de las pozas

La provincia de Ourense volvió ayer a padecer una jornada asfixiante de calor con temperaturas que llegaron o sobrepasaron los 40 grados en la estaciones de Ourense, Remuíño (Arnoia) y A Portela (Vilamartín de Valdeorras) pero los rozaron también en Rubiá, Larouco, Verín, Laza o Xinzo. La máxima de toda la provincia se alcanzó en Vilamartín con 40,8.

En el caso de la ciudad, los termómetros se detuvieron en los 40,3 grados centígrados (el récord para junio está fijado en los 40,9 que se dieron el 26 de junio de 2011), dos décimas más que en la jornada de ayer, donde se registraron 40,1 grados.

El intenso calor hace que los ourensanos se refugien en las riberas de los ríos, aunque no todos van en busca de aguas frías. Las termas públicas de Outariz y A Chavasqueira se convirtieron ayer en un ir y venir de vecinos  y turistas, que se animaron a sumergirse en las cálidas aguas de las pozas. La temperatura más baja de las charcas de A Chavasqueira rondaba ayer a las 13,00 horas los 39 grados centígrados y, la máxima, los 41 pero con entrada de agua fría, según el socorrista Alejandro Ramos: "Es que si no le metes agua fría, la temperatura puede llegar hasta los 50 grados centígrados". 

Chelo Rivera, de 65 años, acude con frecuencia a estas termas públicas, a pesar de las altas temperaturas de estos últimos días. "Non temos outra praia", reconoce. Afirma que el tiempo máximo que permanece sumergida en la charcas ronda los 15 minutos. "E despois salgo e refréscome ca mangueira ou póñome á sombra", explica. También a la sombra, debajo de una morera, permanecía José Manuel Márquez, de 60 años. "Hay que ir alternando. Con este calor te cueces por dentro y por fuera", dice entre risas.

"É unha marabilla o que hai en  Ourense!", indica Junior Ramos,  vecino de Santiago. "Despois de estar dentro da poza, saes moi fresco. Notas o contraste". Una sensación que comparte con Laura Vázquez, una joven de 25 años. "Non noto a calor. De feito, ao saír notas unha frescura... Encántame, sobre todo, sendo gratis". 

No obstante, el socorrista Alejandro Ramos aconseja a los usuarios no permanecer dentro de las termas más de media hora. "La gente pasa ahí todo el día. No está concienciada del riesgo que esto supone. Deben hacer caso a la normativa, que establece un tiempo máximo de 30 minutos", explica.

Mientras las calles y terrazas de la ciudad permanecían desiertas, las piscinas estaban rebosar. Durante la jornada de ayer, más de 2.300 personas se pasaron por el complejo deportivo de Monterrei, con un aforo para 2.100 usuarios.

PREVISIÓN

En cuanto a la previsión, el noroeste de Ourense, la zona del Miño y Valdeorras estarán hoy en aviso amarillo por temperaturas superiores a los 36 grados centígrados. En este sentido, el meteorólogo de Meteogalicia Juan Portela apunta que la ola de calor empezará a remitir hoy, descendiendo la temperatura "lentamente" a medida que avanza la semana. "Mañá (por hoy) teremos un par de graos menos ca hoxe, pasando de alerta laranxa a amarela, pero para a poboación tampouco vai a haber tanta diferenza", explica.

La tregua llegará el miércoles. "Non é que vaia a facer fresco, pero será unha xornada máis preto dos 30", anuncia Juan Portela. Además, no se descarta la aparición de tormentas en la provincia. Se pondrá así fin a la masa de aire cálida que llegó a Galicia el pasado viernes. "Déronse tódolos ingredientes para que teñamos un episodio de temperaturas extremas porque temos aire cálido e moi seco e moita radicación solar xa que estamos nunha época do ano moi preto do solsticio", puntualiza Portela.

En cualquier caso, se prevé un verano "complicado" para los montes gallegos, según el delegado del gobierno en Galicia, Santiago Villanueva, que reconoce que el riesgo de incendios es muy alto. 

Ayer en Melón, se registró a las 19,57 horas un incendio forestal en la parroquia de Quins. Hasta el lugar, se movilizó un agente y dos brigadas. También, fue necesaria la intervención de una motobomba y un helicóptero. Al cierre de esta edición, el fuego permanecía activo. 

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