Ingresó en el CHUO para que se restablezca y cuente a la Policía lo que le pasó
Omar Delgado López, de 22 años, el joven de A Ponte que estaba desaparecido desde las 03,30 horas del pasado día 21, regresó a su domicilio en la noche del pasado día 24.
La Policía Nacional, nada más tener conocimiento de su regreso, acudió al domicilio con el objetivo de dialogar con él para esclarecer lo que le había pasado, si se había ido por voluntad propia o se lo habían llevado en contra de su voluntad. Pero la presencia de los agentes en la vivienda no sirvió de nada para esclarecer, de momento, la desaparición, dado que el joven, según fuentes policiales, no se encontraba en condiciones de mantener un diálogo coherente, estaba completamente "aturdido y desorientado". No se acordaba de nada de lo que le había pasado.
Ante la situación en que se encontraba, fue alertado el personal sanitario, acudiendo al domicilio una ambulancia del 061, que lo trasladó al Complexo Hospitalario Universitario (CHUO), donde fue sometido a un chequeo médico, siendo ingresado posteriormente en la Unidad de Agudos, acompañado de sus familiares.
Mientras, la Policía Nacional está a la espera de que se recupere para tomarle declaración y dar por cerrado el caso.
Los agentes calculaban que entre "este jueves y este viernes" pueda dar detalles de lo sucedido entre la madrugada del pasado viernes y el momento en que regresó a su casa. Los agentes, según pudo saber este periódico, tienen sobre la mesa varios interrogantes sobre la desaparición: por qué no respondía a las llamadas a su teléfono móvil o por qué no aviso a sus amigos ni a los familiares.
Amplio dispositivo
La desaparición del joven fue denunciada en la tarde del pasado viernes por su padres, después de que lo buscaran sus compañeros en los lugares que solía frecuentar. También lo llamaron en reiteradas ocasiones a su teléfono, pero no respondió.
La Policía Nacional activó el protocolo de búsqueda, alertando a la Guardia Civil, Policía Local y efectivos de emergencia. Todos ellos distribuyeron la fotografía del joven a través de las redes sociales.
Protección Civil rastreó los cauces de los ríos Barbaña y Miño, mientras la Policía Nacional seguía el rastro del teléfono móvil con el objetivo de encontrar una pista que le llevara a su paradero. Los agentes también interrogaron a los compañeros con los que se divertía en la discoteca Onix, en la calle Valle Inclán de la ciudad. Todos ellos se mostraban este miércoles contentos con el regreso del joven a su vivienda, abogando por su pronta recuperación para que pueda dar explicaciones de lo que le ha sucedido.
