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La oposición pide "pruebas de carga" en la Praza provisional

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photo_camera Obras de la Praza de Abastos provisional de la Alameda.

La comisión de seguimiento de las obras en la Alameda ve imposible el cambio de ubicación hasta enero

El traslado de los comerciantes de la Praza de Abastos número 1 al edificio provisional podría demorarse hasta pasadas las fechas navideñas, según se concluye de la reunión de la comisión de seguimiento mantenida ayer entre gobierno local y oposición.

La concejala de Comercio, Flora Moure, se reunió con los técnicos y José Angel Vázquez Barquero, del PSOE; Manuel Álvarez, de DO, y Miguel Doval, de Ourense en Común, para analizar el estado actual del proyecto de rehabilitación de la Praza de Abastos número 1 y la planificación del traslado al edificio provisional de la Alameda do Concello.

En la reunión, Moure transmitió a los grupos la concesión de la prórroga que solicitó la empresa encargada de levantar la estructura en la Alameda, la UTE conformada por Petrolam y Emergis, que se había comprometido a tener concluida la obra en estos días.

Sin embargo, el nuevo plazo sitúa en el 13 de diciembre la finalización de los trabajos. Por ello, durante la reunión se habló de la poca conveniencia de realizar el traslado en esas fechas, al coincidir con la campaña navideña. Así coincidieron en que lo más probable es que los placeros quieran esperar a mediados de enero para iniciar el movimiento hacia la Alameda. Tanto Barquero como Doval se mostraron "seguros" de que hasta mediados de enero no habrá traslado, un extremo reconocido por la propia Moure, que cree que no sería del "agrado" de los comerciantes hacerlo en diciembre.

PRUEBA DE CARGA

Durante la reunión, la oposición se interesó por las medidas de seguridad que se llevan a cabo en el edificio provisional de la Alameda. La oposición habló de la necesidad de la realización de una prueba de carga para minimizar los riesgos de derrumbe o apertura de grietas. En la actualidad, la empresa tiene una serie de testigos instalados que informan de la resistencia del suelo de la Alameda a las estructuras colocadas en cada fase. Sin embargo, durante la comisión de seguimiento, Barquero recomendó a Moure que a la conclusión de todas las obras se realizase una prueba de resistencia, algo no previsto inicialmente por la empresa.

"Es lógico que haya que realizar una prueba de carga antes de abrir la Praza al público, en la que se contemple el peso que tendría la maquinaria y los productos de los placeros, así como el peso de las personas que concurran a hacer sus compras. Hay que evitar riesgos innecesarios", alertó Barquero.

El técnico de la empresa se comprometió a estudiar la viabilidad de dicha prueba de carga y no descarta en absoluto su realización. "Se adoptarán todas las medidas de seguridad que hagan falta y la empresa ofreció además dos años de garantía por la instalación", puntualizó Flora Moure. Para Barquero, "lo más preocupante es que no se hubiera previsto hasta ahora la necesidad de realizar dicha prueba de resistencia a las obras".

Por su parte, el representante de OueC, Miguel Doval, también señaló la necesidad de la prueba de resistencia. "Non nos parece suficiente con que a empresa se responsabilice durante dous anos, porque se ocorre unha desgracia iso non valerá para nada", dijo, tras poner como ejemplo las medidas que se toman a la hora de construir puentes o pasarelas. 

Barquero sitúa la nueva Praza para 2020

El portavoz del PSOE en la ciudad, José Ángel Vázquez Barquero, salió de la comisión de seguimiento con el convencimiento de que las obras de rehabilitación de la Praza de Abastos número 1 "no estarán listas al menos hasta el verano de 2020". Así, cree que la obra "no va a empezar antes del verano de 2018". La empresa tendrá 22 meses de plazo para entregar la obra una vez esta se inicie. "Los plazos de formalización de la contratación son más largos que nunca", señaló. El Concello continúa trabajando en los pliegos para poder sacar a licitación la rehabilitación del mercado, blindada tras el apoyo del PSOE para aprobar un compromiso de gasto del total de la reforma (5,5 millones de euros).

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