TRIBUNALES

Un ourensano quebrantó un alejamiento, pero para cumplir con medidas legales

El hombre acudió a Ourense ese día, al Juzgado de Instrucción 3, para designar un abogado y procurador, lo que motivó su entrada en la zona de exclusión (el barrio de A Ponte)

El Juzgado de lo Penal 2 absolvió a Luis G.G., condenado en enero por 21 años de maltrato su exesposa, de un delito de quebrantamiento de condena. La fiscal lo acusaba de no respetar la zona de exclusión decretada por el juzgado para proteger a la víctima. En concreto, por hechos sucedidos el 3 de marzo del pasado año, aunque por este tipo de actuaciones ya fue juzgado en varias ocasiones.

Según recoge la sentencia, "no ha podido probarse que el acusado (con una pulsera de control) tuviera intención y voluntad de quebrantar la prohibición de aproximación impuesto respecto a su exmujer e hijas". La jueza da por buenas sus explicaciones en tanto que quedaron acreditadas: acudió a Ourense ese día, al Juzgado de Instrucción 3, para designar un abogado y procurador, lo que motivó su entrada en la zona de exclusión (el barrio de A Ponte).

Esa misma mañana, se aproximó a la víctima, ya que ambos se encontraban en el centro de la ciudad, pero fue una casualidad y solo duró tres minutos.

Por último, se le detectó en la calle Ribeiriño pero, según la sentencia, había quedado con sus padre para entregarle unos papeles que debía llevar la abogado. "La razón de la presencia del acusado en la zona de exclusión venía motivada por el cumplimiento de un requerimiento judicial", situándose a un kilómetro del trabajo y domicilio de la exmujer y sin que en ningún momento hubiera contacto visual. 

La jueza le recuerda que en próximas ocasiones no puede aprovechar el cumplimiento de  obligaciones legales para moverse libremente dentro de la zona de exclusión. 

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