EN CLAVE OURENSE

Desde la portada a la contraportada

Lunes, 5 - Hay muchas secciones antes

Creo que cada vez hay más gente que empieza a leer el periódico por la parte de atrás. No creo que por la programación de la tele, algunos por los crucigramas, quizá por los anuncios breves. Y, claro, sobre todo por las esquelas. Debe ser un síntoma de la edad. Llegará un día en el que la revolución informativa de este alocado mundo en  el que vivimos nos llevará a situar los óbitos en las primeras páginas, en vez del pleno del Concello, los datos del paro o la estadística de inversión pública. A fin de cuentas, solo se trata de cambiar unos lutos por los otros. El lunes, tomases el periódico por donde lo tomases, el fantasma de la vejez y la soledad nos sobrevolaba. Soledad en la ciudad: se disparan los rescates de mayores que se caen en casa, era el titular de la información principal. Julio tiene 93 años y Elisa, 83. Ambos cuentan su historia, que sirve para dar un matiz humano a los números, siempre fríos. Pero también hay otras miradas menos lánguidas. Creo, o quiero creer, que no todas las situaciones abocan a la amargura, a hombres y mujeres abrazando el portarretratos familiar, a miradas perdidas en ese lugar en el que habitan las añoranzas, a suspiros que brotan con los recuerdos de la lozanía pasada. Hay abuelos capaces de vivir con intensidad cada segundo, que gestionan bien sus propias limitaciones. A fin de cuentas, los yayos de hoy moldearon su personalidad sobre todo con las limitaciones, la vida les ha hecho callo. Son más duros, no más insensibles. Cuando nos toque llegar allí, si toca, llegaremos con la piel más fina, más propensos al hematoma físico y emocional. Sé de abuelos que leen todos los días este periódico y lo hacen, por donde deben: por la portada. Hay mucha vida antes, hay mucho que leer antes de llegar a las esquelas.

Martes, 6 - Viviendo el síndrome del último tren

Con el AVE estamos sufriendo eso que se llama el síndrome del último tren. Es ese estado vital en el que te tienes que subir a todo si no quieres quedarte en el andén, con el pañuelo desplegado y diciendo adiós al progreso y a sus supuestas bondades. El tren de alta velocidad es la llave del porvenir, nos han dicho. Pero en el llavero hay otras: las comunicaciones ferroviarias con la provincia no pasan por su mejor momentos, ni está prevista mucha mejoría a corto y medio plazo. A lo sumo mantener el material, poca modernización se espera. No es de extrañar que en ese contexto la mirada se dirija a lugares con mejores comunicaciones. Además de la eterna crisis ferroviaria, en el periódico también se informa de que una de cada diez viviendas compradas por ourensanos se adquieren en Pontevedra. Como dice un agente inmobiliario de la capital para justificar la estadística, "hoy estás más cerca de cualquiera de las villas y playas de Pontevedra que de O Barco de Valdeorras".

Miércoles, 7 - Lo hace porque no le queda otro remedio

Página 5 de este periódico: Tráfico permite ahora a los ciclistas llevar las luces intermitentes. No, no lo hace por convencimiento. Por convicción redactó la absurda norma que llevó a un agente a imponer 200 euros de multa a un cicloturista por llevar los distintivos luminosos para que los coches le viesen. No, no retira por convicción la norma. Lo hace por la presión ejercida, por los altavoces que han propagado lo absurdo de la multa, por miedo a que siga creciendo la lapidaria frase: "Solo buscan recaudar". Lo hacen por eso, porque Tráfico no perdona 200 euros así como así.

Jueves, 8 - Precio por comer, precio por aparcar

La polémica vuelve al parking del Complexo Hospitalario y tiene su lógica. No es el aparcamiento de El Corte Inglés, al que vas porque quieres, es el estacionamiento de un centro sanitario. No tiene sentido que sea más barato comer dentro del hospital que una pasada por el párking. En la comida intervienen proveedores, productos, elaboración, personal de preparación y atención... Pagas y te alimentas. ¿Qué hay en el aparcamiento más que una plaza para dejar el coche, máquinas para pagar y barreras? 

Viernes, 9 - Solo las emociones superan el tiempo

Una chica que está en las primeras filas para ver el concierto comienza a tambalearse porque la emoción hace ya minutos que ganó la batalla a la razón y le desordenó todo el organismo. Cae como un fardo y se la llevan en volandas. Un grupo de jóvenes forcejea con agentes de seguridad porque quieren estar más cerca de sus ídolos camino del escenario. La cosa se resuelve porra en ristre pero mereció la pena porque pudo verles por una rendija de la verja. Fueron dos segundos, pero qué segundos. Un ingente número de quinceañeras monta guardia ante las taquillas para asegurarse una entrada. Se han organizado y se dan relevos para mantener la posición. Mamá trae la fiambrera. Ahí pasan días hasta que las taquillas se abren. Una chica que no alcanza la mayoría de edad está en la primera fila y ve a sus ídolos de cerca. Se pasa llorando desde el minuto uno hasta el final. Veamos. Los casos contados refieren actuaciones de The Beatles, Rolling Stones, Justin Bieber y los tres concursantes gallegos de OT que estuvieron en el auditorio invitados por el Foro La Región. Cambian los tiempos, solo los tiempos, perviven las emociones. En abuelos, hijos y nietos.

Sábado, 10 - Las promesas y aquellas peticiones

No está previsto cerrar ningún cuartel de la Guardia Civil en Ourense, dijo el Delegado del Gobierno. En tiempos era suficiente una declaración política así para interpretar lo contrario de la promesa. En este caso, como la propuesta viene de un grupo de guardias, parece que la cosa quedará en el cajón. No deja de sorprender, sin embargo, que sean los agentes los autores de semejante petición. 

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