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Los presupuestos para la ciudad para el 2019 sufren un nuevo revés

El Concello debe hacer un plan económico por exceder el techo de gasto, lo que cambia la previsión

El gobierno local de Ourense ha encontrado una nueva piedra en el camino por el que transita para intentar renovar unos presupuestos del Concello que se han venido prorrogando cada ejercicio desde 2015. Cuando el departamento de Facenda ya tenía prácticamente ultimado el borrador de las cuentas para presentar a la oposición, como había garantizado en septiembre el alcalde de la ciudad, Jesús Vázquez, las previsiones recogidas en ese documento deberán ser modificadas.

La causa de este cambio hay que encontrarla en la obligación de elaborar un plan económico financiero para los dos próximos años, después de que el interventor municipal detectase un incumplimiento del techo de gasto en la liquidación del ejercicio 2017.

El alto funcionario emitía el 1 de octubre un informe del que se dio cuenta en el pleno ordinario de octubre en el que reflejaba que  "por un erro interpretativo" se calculó un límite de gasto más elevado del que realmente correspondía, al tomarse como referencia las cifras fijadas por el plan económico financiero que tuvo que realizar el Concello en 2015 y no las magnitudes presupuestarias de la liquidación de 2016, dado que la vigencia del plan quedaba establecida hasta el 31 de diciembre de ese año.

Ante esto, la edil de Facenda, Ana Fernández Morenza, mostraba su "sorpresa", recordando que el propio interventor había avalado la liquidación de 2017 el pasado mes de julio, por lo que solicitó un informe complementario que ya ha sido redactado.

En él, el funcionario se ratifica en las apreciaciones. "Pouco máis se pode engadir ó subscrito", recoge su dictamen, que "reitera" la obligación de realizar un plan económico financiero "para reestablecer a situación de desequilibro observada", al excederse el techo de gasto en algo más de tres millones.

"Ya estamos en marcha con su elaboración", explica Morenza, apuntando que debe ser aprobado antes de final de año por el pleno para remitírselo a la Xunta. El escenario obliga también a recalcular el techo de gasto para 2019 y, en consecuencia, modificar el borrador de presupuesto que pretende sacar adelante.

"Haremos ambos procedimientos en paralelo", destaca la responsable de Facenda, que reconoce que el plan económico "va a condicionar algo la gestión", pero subraya que "tenemos la gran suerte de que el Concello de Ourense está saneado, por lo que no será comparable al plan que tuvimos que aprobar en 2015".

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