Vecinos de Nosa Señora da Saínza, tras el último atropello mortal, critican los excesos de velocidad
El último atropello mortal en la ciudad, el que le costó la vida a Rolando Cid Camiña (87 años) en la tarde del martes cuando cruzaba por un paso de peatones de Nosa Señora da Saínza, ha indignado a los vecinos de una calle con cuatro carriles, la misma en la que ya murió una mujer en enero de 2016 . Según aseguran, los coches, al tratarse de un tramo recto, circulan a demasiada velocidad, un problema que se acrecienta durante las noches. "Algunos coches hacen auténticos rallies", asegura Manuela Vidal.
Ermitas Muñoz recuerda que es una de la calles más concurridas del casco urbano ya que da acceso al Complexo Hospitalario de Ourense, y de ahí que, según valora, "debería haber bandas rugosas u otras medidas para reducir la velocidad".Los vecinos se suman así a otras voces que reclaman para Ourense medidas que pacifiquen la velocidad, tanto con resaltos en las calles como con más medios de vigilancia (radares fijos), además de semáforos con foto-rojo y mayor presencia policial en las calles.
El concejal de Tráfico de Ourense, Carlos Campos, quien lamentó el desgraciado accidente, asegura que, según el atestado de la Policía Local, la velocidad no fue la causante del último atropello mortal. "No se pusieron de acuerdo en quién pasaba primero", explicó. Aún así, confirmó que el radar móvil cedido por la Dirección General de Tráfico volvió a salir a las calles después de meses sin uso. El objetivo -asegura- "controlar la velocidad en las principales arterias de la ciudad".
Asimismo, asegura que se trabaja con la idea de reducir a 40 kilómetros por hora la velocidad en A Saínza o incluso la instalación de bandas rugosas. La señalización semafórica en breve se reforzará en el entorno del nuevo edificio hospitalario ya que el tráfico se canalizará por esa calle.
El Sindicato Profesional de Policías Municipales de España (SPPME) lo tiene claro: "El diseño del espacio público y la señalización debe ser la medida fundamental, priorizando los peatones, bicicletas y transporte público sobre los automóviles, tal como ocurre, por ejemplo, en Pontevedra", asegura el delegado ourensano Francisco Cabello Domínguez. Objetivos que, según añade, pasan por "crear una cultura de la movilidad urbana que no debe perder de vista el Plan tipo de Seguridad vial urbana de la DGT y el Libro Verde de la UE". Y recuerda que a nivel policial hay que tener en cuenta el déficit en la plantilla y que, por tanto, "la organización no puede ser la misma que hace 30 años".
Hasta la fecha, con dos atropellos mortales en 14 días , la Policía Local se ha limitado a campañas puntuales de prevención y sensibilización para peatones y conductores (la última del 16 al 24 de este mes). Incluyó controles preventivos en cebreados (peatones, conductores, vehículos mal estacionados, obstaculización de visibilidad) y zonas próximas. Los agentes multaron a 56 personas: 34 por estacionamientos indebidos, 16 por no respetar la prioridad de paso o del semáforo y seis a peatones por cruzar mal la vía.
Además, hubo charlas propiciadas por parte de la Concejalía de Tráfico y Policía Local en centros de mayores, principalmente, y otros centros públicos y privados.
Pero, según precisa Carlos Campos, la campaña no finalizó. Se completará con más charlas a las asociaciones de vecinos y cartelería alusiva en las traseras de los autobuses o en los mupis. "En colaboración con la Concejalía de Servicios Sociales y sus voluntarios iremos por los barrios para repartir carteles y colocar advertencias en los retrovisores de los coches", explica.
Para el SPPME, las medidas coercitivas deben ser temporales. "Este es un tema muy serio, prioritario, y requiere todo el esfuerzo posible por parte de los responsables".
La mesa de mobilidade se reúne hoy después de un año
El Concello convocó para esta mañana la Mesa da Mobilidade después de un año sin reuniones. El concejal que la preside, José Araújo, asegura que trasladará a sus integrantes los últimos pasos dados"para a mellora da calidade ambiental, pacificación do tráfico, mobilidade, accesibilidade e integración da bicicleta na cidade", con la creación de una comisión técnica formada por representantes de los cuatro grupos políticos, técnicos municipales y la consultoría de arquitectura y urbanismo Urba+ que redactó el Plan de Mobilidade de Ourense en 2012.
Se trata de una especie de "grupo motor", según las palabras del edil de Infraestructuras, para implantar "un modelo máis participativo no que os axentes sociais e a cidadanía podan opinar". A través de talleres, encuestas o estudios podrían canalizar esas sugerencias sobre cuestiones concretas. El plan inicial es una especie de hoja de ruta que "haberá que mellorar".
Araújo insiste en la importancia de que haya consenso en todas las cuestiones relativas a la mobilidad, "independentemente de quen goberne" y, por eso, se dará cabida a los integrantes de la mesa de mobilidad para trabajar en los equipos creados ad hoc.
