SANIDAD

Reclama 500.000 euros al Sergas tras perder a su bebé en un parto urgente

La paciente considera que hubo negligencia médica tras "falta de supervisión durante embarazo de riesgo y atenciones nefastas"

Una paciente del CHUO solicita al Sergas una indemnización de 500.000 euros por daños y perjuicios al perder el bebé que esperaba en una cesárea urgente tras un embarazo de riesgo. Los hechos sucedieron en diciembre de 2016. 

La denunciante considera que existe una "relación de causalidad clara, directa y sin interferencias entre la negligente actuación de los servicios sanitarios y el resultado lesivo acontecido por falta de supervisión durante el embarazo de riesgo, como por las atenciones nefastas y atropelladas durante el parto, así como por la creación de una infección enorme y su posterior cuidado". 

La paciente, con obesidad mórbida y alteraciones a nivel endocrino y ginecológico, hizo el seguimiento de su gestación en el Hospital de Verín, donde "no fue medicada pese a sus antecedentes". Es el 21 de octubre de 2016, en la semana 34 de gestación, cuando señalan por primera vez, según la denuncia,  el "riesgo de grado III debido a la obesidad mórbida y la diabetes gestacional". En ese momento, "el personal médico de Verín informa de que no tienen medios para practicar el alumbramiento en estas condiciones", por lo que es derivada a Ourense. 

El 2 de diciembre de 2016, la denunciante es informada, según la denuncia, de que el parto será natural. El 7 de diciembre, durante un test basal, "por primera vez no le permiten oír el latido del bebé", dice el escrito. Cuando entrega los resultados del test basal, "nota un flujo amarillento de mal olor al acudir al baño". La paciente afirma que  tras una exploración, "ven ausencia de líquido amniótico y no encuentran el latido al feto. Le hacen un nuevo basal y le informan de de que será provocado un parto natural. Terminan por extraer al feto, muerto, tras una intervención de nueve horas. Un informe posterior confirma "infección por cicatriz". 

La causa se mantiene en sobreseimiento provisional, tras incoar diligencias el 9 de diciembre de 2017 en el juzgado de Instrucción  2 de Ourense. La denuncia expresa que "no se dispone todavía de los resultados de la autopsia del feto para conocer si ha existido negligencia médica". Desde el Sergas rechazan hacer declaraciones, "al encontrarse el procedimiento abierto".

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