NATURALEZA

Robles, pinos y castaños de la provincia, bajo
la sombra de las plagas

Medio Rural busca controlar los focos para que el daño sea "asumible" 

Robles, castaños y pinos encabezan la lista de especies más afectadas por plagas y enfermedades en los montes ourensanos. La plaga que amenaza a los robles está causada por la "Altica quercetorum", mientras que la que afecta a los castaños procede de China y es conocida como la avispilla del castaño. En el caso de los pinos, pueden verse afectados por perforadores o por la procesionaria, un insecto.

Roble

La ausencia de precipitaciones durante el invierno y la primavera ha provocado una mayor incidencia de la pulga del roble, una plaga producida por la "Altica quercetorum", un escarbajo de la familia Chrysomelidae que en su fase de larva come el parénquima de las hojas (la parte verde que hay entre los nervios), dejándolas con un aspecto de color marrón. Aunque se desconocen los enemigos naturales de la Altica, se tiene conocimiento de un hongo, "Beauveria bassiana", capaz de controlar la plaga del rpbñe, pero, como todos los hongos, prolifera cuando hay humedad. Además, las heladas tardías fueron un factor de desfoliación más, secando las hojas que estaban naciendo.

En la actualidad, se detecta un repunte de esta plaga en los robles situados cerca de la ciudad, en la carretera de Celanova y en la zona de A Limia. "En mayor o menor medida, se puede ver el ataque por toda la provincia, aunque no muy intenso", señala Francisco Antonio Gómez, jefe del servicio de montes de la jefatura territorial de la Consellería de Medio Rural en Ourense. No obstante, de esta plaga ya se tenía constancia de su presencia desde hace años. En 1996, se registró un ataque en la zona del Ribeiro, con epicentro en Leiro, y en 2010 se detectó otro que afectó a la zona cercana a Ourense, San Cibrao, Taboadela y Pereiro.

Desde el servicio de montes de la jefatura territorial de Medio Rural no cuentan con una estimación de la superficie afectada en la provincia. "Es muy difícil porque no hay masas de roble grande. No es como los pinares, que hay montes de pino de muchas hectáreas. El roble se presenta en mosaico, entre cultivos y entre los pueblos". El operativo que llevan a cabo consiste en localizar las zonas de ataque por si interesara realizar un tratamiento parcial de cara al otoño del año próximo. "No se suele tratar porque por sí misma remite de unos años para otro. Solo se hacen tratamiento cuando hay un ataque grande".

Castaño

Ya localizada está la avispilla del castaño, provocada por la "Dryocosmus kuriphil", que disminuye la producción de castaña. Esta plaga se detectó por primera vez hace cuatro años en Amoeiro y, de forma gradual, se fue extendiendo afectando en la actualidad a prácticamente toda la provincia. Todos los años se realizan sueltas de un enemigo natural de la avispilla, que es el "Torymus sinensis", un parásito exótico que pone los huevos en la agalla que creó la avispilla. Este año se dispersaron 8.000 viales (ampollas de vidrio), compuestas cada una de al menos 30 insectos. "Es otra de las plagas con las que hay que convivir. La clave está en conseguir un equilibrio entre 'Torymus' y 'Dryocosmus", afirma.

Pino

Otra de las especies en la lista negra de especies amenazadas por plagas es el pino. Los insectos perforadores, que hacen galerías en las madera llegando, incluso, a secar los ejemplares más jóvenes, afecta a los pinares del norte y este de la provincia. La presencia de procesionaria, insecto que hace nidos en el pino semejantes a bolsas de algodón, es mayor en la oriental, en la zona de Valdeorras y Viana. El tratamiento dependerá del daño ocasionado. "No se trata de exterminar una plaga. Ni sería posible aunque quisiéramos. De lo que se trata es de bajar la población a un nivel en el que el daño sea asumible", puntualiza el jefe del servicio de Medio Rural. 

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