En diez años también sumaron cotizantes la industria alimentaria, la automoción y el transporte
La crisis económica, que arranzó hace diez años, ha dejado un reguero de desempleo, pero también algunas actividades económicas han aguantado la crudeza del temporal. La afiliación a la Seguridad Social por profesiones es uno de los mejores termómetros. Los servicios sociosanitarios, incluyendo ocio y atención directa, han sido los mejor parados. Pero también la industria alimentaria, la automoción, transporte y hostelería han saldado el decenio negro en positivo. Por el contrario, el lastre ha venido del sector de la construcción y actividades conexas.
En el año 2008, con el pistoletazo de la crisis, se contabilizaban 111.405 afiliados a la Seguridad Social en Ourense, un sueño comparado con los 101.858 actuales, aunque el peor ejercicio fue el del 2013, con 97.728 cotizantes. En el detalle sobre las profesiones que han logrado incrementar sus efectivos está la asistencia a residencias, que ha pasado de 2.112 afiliados a 2.846 en diez años.
En el mismo gremio, el epígrafe de otros servicios personales ha crecido desde los 1.787 cotizantes a los 2.010. En el apartado general de servicios sociales en la provincia ahora hay 1.349 trabajadores en alta, cuando al comienzo de la crisis eran 872. En empleo doméstico se ha pasado de 3.001 afiliaciones a 3.282.
En actividades sanitarias el salto va desde los 6.729 a los 7.003. Son en la mayoría de los casos actividades relacionadas con el envejecimiento de la población. Ello comporta la atención y cuidado, pero también el ocio y lo que se conoce como envejecimiento activo.
También tiene saldo positivo la industria alimentaria, que pasó de 2.252 afiliados en el 2008 a los 2.593 contabilizados en la actualidad. Algunas actividades industriales, caso de la automoción o el transporte, también cierra en positivo aunque, sin duda, ha sido la hostelería la que mejores cifras ha conseguido al ganar más de un millar de afiliados en diez años, pasando de las 6.330 altas de entonces a las 7.352 actuales.
Proceso inverso
Por lo demás, en cuanto a los sectores más castigados por la recesión económica, no se describen grandes novedades. Los datos de la Seguridad Social confirman que la construcción y el sector inmobiliario ha sido los más dañados. En el epígrafe de construcción especializada se pasó de 7.322 afiliados en el 2008 a los 5.311 actuales. En construcción de edificios, de los 5.129 a los 2.451.
La banca ha sido otro de los sectores que restaron efectivos, de 1.475 cotizantes en la provincia a los 879. En el comercio, pese a la caída del consumo, el descenso fue más leve: de 11.168 afiliados a los 10.828 actuales.
