Soto esgrime otros 17 contratos en el servicio desde 1999

El alcalde enmarcó ayer la denuncia sindical "no marco dun expediente dunha compatibilidade que o único que pretendía era recusar a este alcalde e a concelleira de Urbanismo", en referencia a Javier García Gago, asesor jurídico adjunto y representante de la CIG.

Su compatibilidad para dar clases en la Universidad en horario de mañana fue desestimada en el pleno de diciembre -lo que provocó las mayores discrepancias en el seno del grupo municipal socialista- y la denuncia se presentó en octubre, si bien el expediente estaba en marcha.

La concejala de Urbanismo incluyó en su declaración ante el juez esta tesis, asegurándole que García Gago fue jefe de personal del Concello y ya desde 1999 se contrataron asistencias técnicas en el servicio de Rehabilitación. Desde agosto de ese año se contrataron, además de las cuatro denunciadas, otras 17 asistencias técnicas, algunas de las cuales pasaron a ser trabajadores municipales.

En su declaración, Francisco Rodríguez afirmó que los reparos "no eran cosa extraña" y negó haber participado en la contratación de estas personas, de las que aseguró conocer sólo a una de ellas. Según él, un decreto de 2007 prohibía a estas personas realizar su trabajo en instalaciones municipales, negando ser consciente de que lo hicieran.

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