TEATRO

"Tierra del fuego habla de lo peor y lo mejor que habita en nosotros"

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photo_camera Alicia Borrachero y Abdelaif Hwidar, en una escena de la obra

El actor español Abdelatif Hwidar (Mimosas, Si-o-se Pol, Los últimos días, El final del camino),  encarna  al terrorista Hassan El-Fawzi.

"Tierra del fuego", la obra de Mario Diament dirigida por Claudio Tocalchir con un reparto encabezado por Alicia Borrachero, Ben Temple y Abdelatif Hwidar, se pone en escena mañana, domingo, a las 19,00 horas en el Teatro Principal. El actor español Abdelatif Hwidar (Mimosas, Si-o-se Pol, Los últimos días, El final del camino),  encarna  al terrorista Hassan El-Fawzi.

¿De qué habla la obra? 
Habla de escuchar y perdonar.

¿La realidad pasa a escena? 
Sí. La obra se basa en las vivencias de una azafata israelí que perdió a su mejor amiga en un atentado en Londres en 1978. Veinte años más tarde quiso conocer al terrorista, que cumplía cadena perpetua en una cárcel británica  y averiguar por qué lo hizo. Acabó firmando una carta pidiendo su libertad.

¿Qué le aporta este trabajo?
En primer lugar supone para mí el descubrir un nuevo mundo dentro de la interpretación. Yo era actor de televisión y cine y con Tierra del Fuego ha sido como entrar por la puerta grande con un personaje entrañable, intenso potente y contradictorio, con unos compañeros excelentes, un texto increíble y un director inmejorable. 

¿Es fácil encajar el personaje? 
Sí, porque esto tiene mucho de desaprender. Tendemos a adquirir conocimientos que convertimos en axiomas o en dogmas y este es un trabajo que requiere de una gran flexibilidad interna para derribar  tus propios límites, para ser honesto con el oficio. Hay que hacerlo con el corazón y el alma. Hay que entregarse  al personaje lo más puro posible. 

¿Mucho aprendizaje previo?
Se aprende muchísimo. Si eres un actor con curiosidad tu cultura se nutre de las cosas más insospechadas. Con esta obra leí mucho, tanto a judíos como Marek Edelman como al palestino Gassan Kanafani. Amplié  mi visión histórica del Holocausto y del conflicto palestino israelí. Descubrí que el mayor rigor histórico que se ha hecho con el caso de Palestina con Israel, lo ha hecho Ilan Pappé, un catedrático de Historia israelí. Se trata de un trabajo impresionante con el que ha sacado los colores a su propio país. Si tienes curiosidad, la labor de documentación siempre será una inmersión en un universo que te va enriquecer.

Terrorismo, ¿hay buenos y malos?
La obra se basa en un acto terrorista pero habla de lo mejor y de lo peor que habita en nosotros, los seres humanos. Son seis personajes y el espectador será incapaz de identificarse con uno en concreto o rescatar a uno en concreto. Es una obra muy equilibrada.

¿Es una catarsis? 
Primero provoca curiosidad para entender la situación porque la información  que le llega está mecanizada a través de los medios de comunicación. A continuación le hace entender la situación desde lo pequeño, desde las personas que se miran cara a cara y eso tiene un gran valor. Sí, realmente creo que provoca una especie de catarsis.

El mensaje al espectador es...
Que se preparen para una experiencia intensa pero dolorosamente bella. No les va a defraudar. El mayor aliado de la obra es la inteligencia del espectador y creo que últimamente andamos cansados de textos o de discursos que ofenden la inteligencia.

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