La basura estaba al final en terreno del concello de la ciudad, que tenía previsto este miércoles proceder a su limpieza
El Concello de Ourense tenía previsto en la tarde de este miércoles retirar toda la basura que hay amontonada –electrodomésticos inservibles, colchones, garrafones, cajas de madera, ropa vieja y aspiradoras, entre otro material inservible– en un vertedero ilegal que se formó en un margen de un camino que da acceso al colegio de Seixalbo.
Los trabajos de limpieza se iniciaron después de que los técnicos municipales de Ourense y San Cibrao revisaran los lindes entre ambos municipios al no estar claro si el vertedero incontrolado estaba en un concello o en el otro.
El personal revisó los mojones entre los dos municipios y procedió al cierre del vertedero ilegal, después de que un particular alertara el pasado martes de la cantidad de restos orgánicos que había acumulados.
El lugar, al parecer, venía siendo utilizado a diario por personas para deshacerse de todo tipo de objetos, pese a tener a escasa distancia un punto limpio, el de la cercana Santa Mariña. Alguna de ellas los trasladaron en coche.
El Concello de la ciudad, nada más tener conocimiento del vertedero incontrolado, envió personal del Servicio de Limpieza a inspeccionar el lugar, que inicialmente sospecharon que podría pertenecer al municipio de San Cibrao. Las dudas se disiparon en la tarde del miércoles una vez revisados los mojones.
Los técnicos municipales, tras retirar la basura acumulada, instalaron señalización para prohibir el depósito de basura, advirtiendo a los que lo hagan con incoarles un expediente sancionador, que finalizará con una multa.
Desde la entidad local aseguran que, una vez retirada la basura y acondicionada la zona, se establecerá vigilancia, sobre todo por las noches, para impedir nuevos vertidos.
