El Día Internacional del Voluntariado reunió en la Praza Maior a 22 asociaciones con el fin de dar a conocer su labor entre la sociedad ourensana, además de buscar nuevos apoyos para sus campañas.
La Praza Maior se convirtió ayer en un improvisado escenario para conmemorar el Día Internacional del Voluntariado, que se celebra cada 5 de diciembre desde 1985. Un total de 22 entidades participaron en la Feira de Solidariedade e Voluntariado, organizada por el Concelllo de Ourense para difundir su labor entre la sociedad ourensana. "Un día en el que queremos visibilizar nuestro trabajo y reconocer a los voluntarios que colaboran con nosotros", indicó Natalia Fernández, directora provincial de voluntariado de Cruz Roja.
Las entidades aprovecharon también la jornada para reclamar más apoyo. Es el caso de la Asociación Ourensana de Esclerosis Múltiple. "Es cierto que en los últimos años esta enfermedad es más conocida entre la sociedad porque cada vez afecta a más jóvenes, pero necesitamos más apoyo social. Por ejemplo, eliminando las barreras arquitectónicas con las que nos encontramos cuando salimos a la calle", destacó Jesús Álvarez, representante de la entidad, que ofrece a los afectados por esta patología talleres de manualidades, fisioterapia y logopedia.
Desde la Asociación de Personas con Enfermedad Renal (Alcer) piden también a los ourensanos que se hagan donantes. "La tasa de negatividad en la provincia es alta. La población que tenemos es muy mayor y reacia a donar, sobre todo por desconocimiento", destacó Carlos Caamaño, vicepresidente de Alcer.
Probar la experiencia de ser voluntario fue el mensaje que transmitieron los representantes de Amigos da Terra, que animaron a los jóvenes a participar en el Servicio de Voluntariado Europeo, subvencionado por la Unión Europea dentro del programa Erasmus Plus. "Cada ano, enviamos a catro ou cinco rapaces. É unha forma de coñecer outras culturas e colaborar con outras asociacións", indicó Ángel Dorrío, técnico en medio ambiente del colectivo.
En esta misma línea, las entidades participantes en la feria buscan más voluntarios para sus campañas. "Ao longo do ano, contamos con máis de 300 persoas voluntarias pero sempre se precisan máis. É algo moi gratificante. Un compromiso social que repercute en ti porque ademáis de axudar, aprendes", puntualizó Laura Rodríguez, trabajadora y voluntaria de la asociación juvenil Amencer. Una idea que comparte con Cindy Martínez, de Xarela: "Ser voluntario engancha porque conoces a gente y disfrutas de estancias en otros países. No te pagan materialmente pero sí con otros valores".
