REPORTAJE

El pesimismo reina entre los jóvenes

El paro está haciendo especial mella en el sentir de los ourensanos jóvenes, escépticos ante la mejora de los números del empleo en la provincia. La opción de salir del país sigue como una de las más asentadas entre ellos

La mejora en las cifras del paro de los últimos meses en la provincia no se presenta como una circunstancia realista dentro del colectivo más afectado por la escasez de empleo.

El sentir general de la juventud ourensana continúa manifestando un claro pesimismo, orientado hacia una encrucijada que parece ceñirse a tres únicas salidas: la búsqueda continua de un puesto de trabajo, el incremento del expediente académico o la marcha en busca de oportunidades al extranjero.

"Teño compañeiras que están traballando en Londres e que están bastante contentas", explica Alba Campos, trabajadora de un centro social de Xinzo. Por su parte, Serxio Souto, estudiante del Campus, indica que la emigración está bien vista por los jóvenes "porque noutros sitios estás en mellores condicións". "Sin lugar a dudas nos tenemos que plantear a corto plazo la opción de salir del país", reconoce Andrés Rodríguez, educador, aunque "no es tan factible para mi ámbito como otras titulaciones, ya que en mi caso tienes que tener un nivel casi perfecto del idioma para poder trabajar directamente con las personas".

Para los jóvenes que optan por quedarse en España, la mejor vía para sobrellevar de un modo productivo la falta de oportunidades laborales pasa por no salir de la universidad o, por lo menos, no interrumpir la realización de acciones formativas. "Hacer cursos sobre todo lo que te encuentres, hacer un máster u otra titulación universitaria", cita Andrés Rodríguez, que en la actualidad trabaja como profesor en una academia y que también ve a los jóvenes obligados a "empapelar la ciudad con currículums".

Una de las grandes preocupaciones de una importante cantidad de estudiantes universitarios es la búsqueda de empleo como modo de poder costear su propia formación, de modo que la falta de trabajo con un horario idóneo supone un problema añadido para poder concluir su formación.

"Es muy difícil, porque tienes que adaptar tus estudios a tu horario laboral", explica la estudiante de Turismo Laura Rodríguez, que indica que "en países como Finlandia, el trabajo que te ofrecen se adecúa al horario de tus estudios, de modo que trabajas las horas que puedes".

Lejos de aclararse su perspectiva, los jóvenes ourensanos afrontan con un marcado escepticismo los datos del paro de este mes de agosto. Raro es el caso en que una persona menor de treinta años da con un empleo con unas condiciones idóneas y parece que, al menos por un tiempo, la juventud no será consciente de un cambio a mejor. "A solución máis difícil sería quedar aquí e intentar cambiar a situación dende dentro, algo que é case imposible porque estás vendido ás condicións socioeconómicas", resume con pesimismo Serxio Souto.

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