Un total de 1.111 visitantes se pasaron por la Oficina de Turismo de Celanova y el Centro de Interpretación Aquae Querquennae-Vía Nova de Bande.
El buen tiempo ha permitido que la oferta cultural y turística repunte durante Semana Santa en Celanova y Baixa Limia. Un total de 1.111 visitantes se pasaron por la Oficina de Turismo de Celanova y el Centro de Interpretación Aquae Querquennae-Vía Nova de Bande. Cifras a las que hay que añadir los cientos de personas que el jueves y el viernes disfrutaron en Celanova de la Feira da Oportunidade y de la escenificación de “La Pasión” y la “Procesión del Santo Entierro”.
En cuanto al suroeste de la provincia, los alojamientos rurales integrados en la Asociación Limia Verde rondaron el lleno. Su presidenta, Patricia Cabaleiro, reconocía que “o nivel de ocupación durante o Xoves e Venres Santo foi do 100%, o sábado caeu algo, entorno ao 80%”.
La “Semana Santa ao Vivo” reforzó la capacidad de atracción que, por sí mismo, tiene Allariz. A expensas de cerrar los datos sobre visitantes que pasaron por la oficina de turismo y la venta de entradas a los museos, el regidor,Francisco García, subrayó “a afluencia de xente durante a semana, principalmente o xoves e venres, onde o nivel de ocupación foi do 100%” y que, en palabras de los propios visitantes, fue “como estar en plena Festa do Boi”.
El hotel monumento habilitado en el monasterio de San Clodio (Leiro), en pleno corazón del Ribeiro, tuvo un nivel de ocupación en la línea del resto de la provincia. Fue "mucho más elevada" que en años anteriores -en 2013, el hotel no abrió por estas fechas al encontrarse en obras-, según fuentes del establecimiento. El jueves y el viernes tuvieron lleno completo, descendiendo durante el fin de semana, aunque el sábado se mantuvo por encima del 50%. La práctica totalidad de los clientes era de origen nacional.
El nivel de ocupación en el Parador de Santo Estevo "fue muy alto, mucho mejor que el registrado el año pasado", según indican desde el establecimiento. El jueves y el viernes "nos acercamos al lleno", con cifras por encima del 90%. La clientela era de origen nacional, fundamentalmente de Madrid, que buscan pasar unos días de descanso y que, según las citadas fuentes, tienen al catamarán del Sil, el paisaje y la riqueza monumental de la zona sus principales atractivos. También registraron una afluencia muy alta durante entre jueves y domingo la cafetería y el restaurante del Parador, de personas que iban de paso recorriendo la Ribeira Sacra.
En Verín, el Parador de Monterrei también alcanzó el lleno entre el jueves y el sábado, que logró igualar los registros alcanzados en 2013 y compensar un flojo comienzo de semana. El restaurante del parador fue otro de los lugares donde más visible se mostró la gran afluencia de turistas. El presidente de los hosteleros de la comarca de Monterrei, Francisco Pérez, reconoció que "notamos máis xente que noutros anos", lo que parece indicar que "a crise afecta en menor medida".
En O Barco, el Pazo do Castro alcanzó el 60 % de ocupación, según su directora, Montserrat Rodríguez. Valoró favorablemente el hecho de que se cubriesen las reservas previamente anuladas ante las previsiones iniciales de lluvia.
