La traducción de la toponimia gallega siempre ha sido particular y deriva en una confusión permanente entre huir de la castellanización o mantener la historia etimológica de los lugares
Cualquiera que pasee, viaje o simplemente viva en Galicia se siente con la misma identidad, aunque el idioma sea diferente. Tras una tribuna publicada en El Español por Pablo Insúa, las reacciones en las redes sociales no se han hecho esperar sobre todo en materia de toponimia e informaciones en gallego. Algunas de las contestaciones han dejado claro que "nunca han tenido ningún problema con el gallego ni con los gallegos".
Voy a contar yo mis problemas con el gallego. Soy andaluza y he vivido en Galicia 9 meses en 2012, 1 año entre el 14 y el 15 y desde junio del 16. En zonas rurales y muy galegofalantes. La primera vez que escuche gallego tenía casi 30 años...
— MarFernández (@marfernandezper) 14 de noviembre de 2017
Pero, la pregunta se escribe imponente cuando sobre el papel aparece Orense u Ourense. Muchos defienden la castellanización del lugar por motivos de lenguaje, otros achacan que son ruinas dialectales que derivaron de una política educativa y social del nacionalismo gallego. Decimos: "¿Orense o Ourense?". Escribimos: "¿Sanxenxo o Sangenjo?". Hablamos de "¿Ginzo o Xinzo?"... Y así siempre.
humor elaborado... entiendo tu confusión al leer A Coruña u Ourense. Cada uno tiene sus limitaciones. Seguro que entiendes Sangenjo.
— Borja Rodiño (@BorjaRodi) 15 de noviembre de 2017
Yo estudie en el instituto Otero Pedrayo en Ourense. Todo en gallego. No te lo crees?
Respecto a las oposiciones hay que sacarse el Celga para acreditar que sabes gallego. A eso me referia por obligar. Lo que pasa es que despues de todo eso, hay quienes no lo hablan.— A. Tarski (@SantosMiguelPS) 15 de noviembre de 2017
Aunque hay opiniones de diferentes ámbitos:
Esa gente que dice que tiene un C1 en inglés en el CV pero no entiende que Lleida es Lérida y Ourense es Orense también vota.
— Santiago (@santi_hegemon) 15 de noviembre de 2017
Pero bueno, que si os tenéis que ir de Mallorca, Alicante, Ourense, Vitoria...porque os molesta que se hable el IDIOMA LOCAL, os vais, que estamos mejor sin esa gentuza facha e ignorante. 👋
— amalia🦉 (@itsamalia) 15 de noviembre de 2017
La batalla social se desentierra tiempo después en un permanente conflicto de opiniones y posturas de normalización que no encuentran una única vía de escritura y de uso. Las explicaciones etimológicas no son suficientes para muchos usuarios de Twitter y analizan la presente disyuntiva presentándola como un paralelismo del conflicto catalán.