HOGAR Y DECORACIÓN

Complementos necesarios para un jardín

girl-1863906_640_result

Si tenemos la suerte tener una casa con jardín, debemos buscar no solo la belleza estética con el reparto de flores, árboles o huertos para que, al salir a él, nos invada esa sensación de alegría y paz que solo los espacios llenos de naturaleza nos ofrecen al espíritu, sino que, además, debemos crear los lugares perfectos para que las personas, dueños y visitas, niños, amigos y familiares, puedan descansar y disfrutar de estos ambientes.

A las construcciones habituales que sirven para pasar buenos ratos y disfrutar activamente de los jardines, como la piscina o la barbacoa, hay que sumarles espacios dedicados al descanso, que inviten a la reunión, lugares para comer, que nos protejan de condiciones climáticas adversas y aún así podamos disfrutar de nuestras zonas verdes.

Cenadores, pérgolas, casetas, tarimas y porches de diferentes estilos, modernos o rústicos, tienen un hueco en cada jardín para todos aquellos que quieren optimizar con belleza los rincones de sus espacios verdes dedicados a juegos, meriendas, baños y desconexión.

Una pérgola para dar sombra a espacios concretos del jardín

Todos hemos visto en alguna ocasión estas estructuras, construidas habitualmente en madera, aunque se pueden encontrar en otros materiales, poblando parques, plazas, jardines, terrazas e incluso azoteas. Están formadas por columnas sobre las que se hacen reposar una serie de vigas con el objetivo de proyectar sombra allá donde se coloquen.

Esta construcción, que ya era muy usada por los antiguos griegos y romanos para mejorar la estética y habitabilidad de sus hogares, se puede encontrar, como hemos comentado, en distintos materiales. En Pérgolas Pergomadera están especializados en pérgolas de madera, las más utilizadas y valoradas, pero debemos saber que también existen pérgolas construidas en materiales como el metal, o en plástico, las más recomendadas para los casos en los que se tienen que desmontar con cierta frecuencia. Por supuesto son menos resistentes y elegantes, aunque sí bastante más baratas.

Como decimos, las pérgolas de madera son las más utilizadas, pues son mucho más atractivas y resistentes a las inclemencias del tiempo y son perfectas para colocarlas a la intemperie. Las maderas que se suelen utilizar son las tropicales provenientes de árboles como el ipe o la teca, pues poseen una gran resistencia natural, aunque también se utilizan maderas tratadas, sobre todo con el sistema de autoclave, que consiste en introducir dentro de la madera diversos agentes protectores por medio de autoclave con vacío.

En cualquier caso, queda en manos del cliente la posibilidad de elegir una pérgola de madera con un aspecto tradicional y más rústico o moderno e innovador, haciendo click en el enlace referenciado más arriba podremos ver diferentes tipos de pérgolas para así tener más claro qué es lo que queremos instalar en nuestros espacios ajardinados.

Un cenador para comer en armonía natural

Para aquellos que desconozcan este término tan enriquecedor para la distribución estética de un jardín, diremos que un celador no es otra cosa que un pabellón, normalmente de forma circular cercado y con una estructura que es propicia para que se cubra de plantas trepadoras, consiguiendo así que forme parte del entorno, casi mimetizándose.

Esta es una construcción bastante ligera, pero muy resistente, que consigue resaltar o mantener el carácter natural y acogedor del lugar donde se instala. Los cenadores para el jardín deben de estar a la vista de todos y aun así perfectamente oculto a las miradas, porque la idea es que formen parte del entorno gracias a las enredaderas, árboles y demás plantas con la que deben ser cubiertos. El cenador de madera se coloca, como norma general, en el centro del jardín, actuando como catalizador del jardín y elemento principal de este.

Los cenadores de madera están conformados por los soportes para la cubierta y laterales (pilares), los travesaños, que serán los encargados de sujetar y reforzar toda la estructura, las cubiertas que es, lógicamente, la parte superior, la tarima que se pisa, las barandillas que pueden ser opcionales y ejercen de elementos de seguridad, aportando diseño y estilo al cenador, y la cimentación, que dependerá de lo que el usuario le exija al cenador y del tipo de cenador.  La madera será del mismo tipo que la utilizada para las pérgolas.

Casetas de madera para diversos usos

La ventaja de colocar una caseta de madera vendrá determinada por el uso que se le quiera dar, ya que estas son fácilmente adaptables. Lo normal es utilizarla para tener recogidos y ordenados todos los elementos y herramientas necesarias para el cuidado y mantenimiento del jardín, así como los utensilios que utilizamos para su disfrute (hamacas, sillas, mesas…) productos para el cuidado de la piscina…

Pero, las casetas de madera para el jardín pueden encontrar otros usos más creativos y divertidos, como una casa infantil. Con un poco de imaginación, puedes cumplir un sueño que todos los niños tienen. Tener su propio espacio para juegos en un entorno natural les ayudará a desarrollar su personalidad y criterios y aprenderán conceptos como el orden y serán más independientes y resolutivos.

También podemos utilizar esta estructura como leñero, un lugar donde almacenar los troncos para la chimenea y que no estén ocupando un espacio excesivo a la intemperie, donde además pueden coger humedad y, por lo tanto, presentar más problemas para arder. También podemos convertir este espacio en un vivero o en un invernadero donde hacer crecer desde las semillas las plantas que después plantaremos en nuestro jardín o proteger las plantas de las temperaturas invernales.

Ampliar la vivienda con un porche de madera         

Un porche de madera nos puede recordar a las películas del género western, pero es un elemento estructural muy moderno y actual que es utilizado para cubrir la entrada de las casas de las inclemencias del tiempo. Aunque hay modelos de porches que se quedan abiertos, todos y cada uno de ellos ofrecen a las entradas de las viviendas un carácter y una personalidad exclusiva, ofreciendo estilo, elegancia y diseño, además de comodidad y más metros de vivienda, ya que se funde parte de interior y parte de exterior.

Un porche invita al descanso, resulta ideal para leer un libro, trabajar con el ordenador o tomar un café mientras se observa a los hijos jugar en el jardín, sobre el césped o en la piscina.
 
 
 

Te puede interesar