A Coruña ha sido la provincia más afectada a lo largo de la jornada por rachas de viento superiores a los cien kilómetros por hora, que incluso han alcanzado los 134 kilómetros
El temporal mantiene en alerta la costa gallega por fuertes vientos y olas con una altura que hoy ha rozado los diez metros, sin causar no obstante incidentes destacables más allá de estropear algunas fiestas de carnaval que han tenido que ser aplazadas y daños de escasa entidad en el paseo marítimo coruñés.
Esta provincia ha sido la más afectada a lo largo de la jornada por rachas de viento superiores a los cien kilómetros por hora, que incluso han alcanzado los 134 kilómetros por hora en Punta Candieira, y olas de 9,5 metros de altura en Punta Langosteira.
La fuerza del mar ha provocado durante la noche olas de tal envergadura que en algún caso han sobrepasado la duna de la playa de Riazor en A Coruña y han cubierto la calzada de arena, lo que ha motivado el cierre de parte del paseo marítimo hasta las once de esta mañana tanto a peatones como a la circulación de vehículos, informan a Efe fuentes de Tráfico.
Los daños causados por el temporal han afectado a una docena de bancos del paseo, a la red semafórica y al alumbrado público, que también han tenido que ser reparados, además de mover algunas rocas, informan fuentes municipales.
Esta tarde se ha cerrado parte del paseo marítimo a los viandantes, no así al tráfico, y también se ha prohibido la circulación de vehículos en la calle Rubine mientras se repara un socavón en la red de saneamiento, unos trabajos que durarán unos diez días.
El Ayuntamiento de A Coruña recomienda a los ciudadanos que eviten acceder a esta zona para evitar riesgos porque la alerta naranja por fenómenos costeros continuará activa mañana con una previsión de fuertes vientos y olas de hasta siete metros.
En el resto de Galicia tampoco se han registrado incidentes de gravedad, y tan solo en Lugo, un tren que circulaba esta mañana a la altura de Rábade se topó con un árbol caído sobre la vía a causa de las fuertes rachas de viento, aunque la central de coordinación de emergencias del 112 indicó que este suceso no tuvo mayores consecuencias ni para los pasajeros ni para el propio ferrocarril.
Incluso en Ferrol se ha registrado esta mañana una falsa alarma en la ría que motivó la puesta en marcha de un operativo para rescatar a una persona que había sido vista entre el oleaje y que finalmente resultó ser un mariscador ataviado con su traje de neopreno, informan a Efe fuentes de Salvamento Marítimo.
Las malas condiciones en el mar han impedido en muchos puertos que sus barcos pudieran salir a faenar, pero han llamado la atención de vecinos y curiosos que, en algún caso, no han podido evitar acercarse al mar para ver cómo rompen las olas pese a las advertencias.
La peor parte de la jornada de hoy por los efectos del temporal se la lleva el Carnaval, que ha visto suspender sus fiestas en localidades como Ferrol o Xinzo, en Ourense.
No así en A Coruña, que pese a sufrir las inclemencias del tiempo ha decidido mantener sus concursos de disfraces aunque sea a cubierto.
La capital herculina llega a la recta final de sus tradicionales celebraciones de Carnaval con la fiesta de los Choqueiros, el concurso de los disfraces más extravagantes de elaboración casera que cada año desfilan en el barrio de Monte Alto.
Tal jornada festiva comenzó a las 17.00 horas con los concursos infantiles de disfraces y continuó con el Concurso de Choqueiros, a las ocho de la tarde, para así cerrar los días grandes del "intocable" carnaval coruñés.
