El inicio de los trabajos dependerá de las alegaciones al proyecto de trazado
Los redactores del proyecto de trazado, previo al de ejecución, del principal acceso a San Vicente (Vilamartín) lo presentaron ayer en la Deputación Provincial. A la cita acudieron técnicos y representaciones de los partidos políticos del organismo provincial y del Concello, además de un representante vecinal. Todos ellos se mostraron de acuerdo con la propuesta elegida por la empresa que realizó el estudio: rellenar la vaguada del río Leira.
"Estamos satisfeitos. Por fin temos un proxecto. Levamos 25 anos con isto", dijo el alcalde de Vilamartín, Enrique Álvarez Barreiro, una vez finalizada la reunión.
Pese a sus declaraciones, la satisfacción es relativa, pues si bien se conoce el tiempo que durarán los trabajos: tres años, sigue siendo una incógnita su fecha de inicio. Esta va a depender de la rapidez con que se superen los trámites de exposición pública y resolución de las posibles alegaciones al proyecto de trazado. Después, llegará el turno de la redacción del proyecto de construcción.
Los redactores del proyecto de afianzamiento de la carretera OU-0807, el principal acceso del núcleo de San Vicente barajaron cinco trazados alternativos. Además de la opción que contempla el relleno de la vaguada también fueron analizadas otras posibilidades, como la elevación del terreno para cruzarla o la construcción de un puente. Sin embargo, la que más convenció a los técnicos fue la de rellenar la vaguada, pues esta medida permitirá consolidar las inestables laderas en las que está ubicada la infraestructura.
Esta inestabilidad del terreno es la causa de que los trabajos de relleno se prolonguen durante tres años. Los autores del trabajo consideran que los materiales empleados para elevar el piso deben consolidararse de forma natural para afirmar el terreno.
Todos los asistentes a la reunión de ayer coincidieron en que el proyecto de trazado elegido es el mejor, pero también son conscientes de que es el más caro, pues el coste de su ejecución fue estimado en aproximadamente 13 millones de euros. En referencia a esta elevada inversión, el alcalde, Enrique Álvarez, insistió en que el Concello es consciente de su importancia y que difícilmente podrá ser asumida en un solo año.
Dos canteras de pizarra que trabajan en la zona ya mostraron su visto bueno al relleno de la vaguada, según fuentes de la Deputación Provincial. Todo lo contrario que sucede con una tercera, cuya concesión minera fue paralizada por la Xunta en una resolución contra la que presentó un recurso contencioso-administrativo la empresa.
