VALDEORRAS

O Barco prima la rehabilitación frente a las nuevas edificaciones

La medida tensiona al gobierno local con la oposición, partidaria de potenciar la construcción

Una ordenanza fiscal de 2013, que regula el impuesto sobre construcciones, instalaciones y obras (ICIO), generó un intenso debate en el seno de la corporación municipal barquense. Lo protagonizaron el alcalde socialista, Alfredo García Rodríguez, y el concejal de Riada Cidadá, Félix García Yáñez. Este último planteó que las bonificaciones del impuesto, que oscilan entre un 75 % y un 95 %, se apliquen a la construcción de vivienda nueva en los núcleos del rural barquense, pues únicamente pueden beneficiarse de ellas quienes rehabilitan casas ya existentes.

El debate surgió al ser rechazada la solicitud de bonificación que presentó un vecino de A Proba que pretende construir una casa. "Nos parece bien que se construyan casas, pero pienso que es mejor que se rehabiliten las viejas", comentó el alcalde, Alfredo García. Añadió que la ordenanza fue redactada con miras a facilitar la recuperación de los núcleos tradicionales, evitando que estos queden reducidos a un montón de casas en ruinas. El regidor también se refirió al impuesto: "Hay que pagar si queremos servicios. Cualquier bonificación tiene que tener una finalidad", dijo. 

La ordenanza prevé bonificaciones del 75 % del ICIO para "obras de mellora ou rehabilitación de calquera construcción para vivenda dos núcleos tradicionais", pero también del 95 % para las proyectadas en el casco antiguo de O Barco, tras la declaración del Plan Especial de Protección y Reforma Interior (PEPRI), y en O Castro, a raíz del Plan de Especial Protección (PEP), en construcciones de interés  histórico y en reformas de infraviviendas. Además, pueden beneficiarse las empresas del parque empresarial de A Raña si promueven la creación de empleo.

"Estas bonificaciones ayudaron a que el casco viejo cambiase de fisonomía. El objetivo debe ser el arreglo de los pueblos", comentó Alfredo García.

El concejal de Riada Cidadá, Félix García, discrepó con la opinión del alcalde y planteó que las bonificaciones también beneficien a quienes construyan casas nuevas en las aldeas: "Bastante esfuerzo supone establecerse en el rural. Hay que facilitarlo y el Concello, lo único que puede hacer en este sentido es rebajar los impuestos". Añadió que la bonificación difícilmente superará los 3.000 euros y planteó revisar la normativa. "Hay que modificar la ordenanza en este sentido".n

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