VALDEORRAS

El control sobre las plagas de la vid presagia una cosecha de calidad

photo_camera Viñedo de la Denominación de Orixe Valdeorras (J.C.)

El Consello Regulador cree que se pueden mejorar las dos últimas vendimias

Las previsiones de producción de uva que manejan los técnicos del Consello Regulador de la Denominación de Orixe Valdeorras son de una cosecha "buena o muy buena". Lo comentó el técnico de este organismo Enrique Pérez Espino, quien matizó que aún habrá que esperar al mes de agosto para conocer las primeras estimaciones de cantidades.

En todo caso, si no surgen imprevistos, la cosecha superará ampliamente a las de los dos últimos años. Eso sí, hay que tener presente que estas, lejos de ser importantes, fueron más bien reducidas. Especialmente, la de 2013, cuando la producción no pasó de los 4,4 millones de kilos. Un año antes, la cosecha alcanzó los 5,3 millones, muy por debajo de los 7,6 de la campaña de 2011. En 2013, el granizo y las heladas se encargaron de arrasar buena parte de los viñedos valdeorreses.

Este año, los problemas se les presentaron a los viticultores en forma de enfermedades. Primero el mildiu y después el oídio hicieron saltar las alarmas ante otro posible año de escasa cosecha. Sin embargo, no parece que esta situación se vaya a repetir. "Hubo un poco de mildiu pero las altas temperaturas lo cortaron. Ahora, la gente está aplicando tratamientos para el oídio, lo que minimizará el daño", explicó el técnico Santiago Pérez.

En ciertas zonas de la Denominación de Orixe pueden verse los daños causados por las enfermedades. Sin embargo, son viñas muy concretas, cuyos propietarios las descuidaron y no aplicaron los tratamientos preventivos, o bien viñedos que están abandonados y que también pueden pasar las enfermedades a las fincas colindantes.

En todo caso, las previsiones que maneja el Consello Regulador que preside José Luis García Pando, son optimistas. Tanto es así, que el pleno decidió aumentar los límites de la producción de uva por hectárea. Estos pasaron de 10.000 a 12.000 kilos para las variedades preferentes, como mencía y godello, y de 12.000 a 14.000 kilos para las autorizadas, como jerez y alicante, entre otras.

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