ENTREVISTA

Natalia Álvarez: “En O Barco, la crisis se notó en que la población inmigrante se redujo mucho"

Natalia
photo_camera Natalia Álvarez Diéguez.

Los colectivos sociales de O Barco homenajearána la concejala de Servizos Sociales

Los colectivos sociales de O Barco homenajearán hoy a Natalia Álvarez Diéguez (O Barco, 1979). Diplomada en Educación Social y máster en dirección de Servicios Sociales que deja la Concejalía de Servizos Sociais. En ella invirtió 12 años, un periodo que dejó su huella en unas asociaciones que quieren agradecer su labor.

¿Cambió mucho Servicios Sociales en estos 12 años?
Cuando entré, el grupo de Alfredo García llevaba cuatro años y  había hecho muchas cosas, pero  en el ámbito social siempre hay algo más por hacer. Las necesidades y las personas cambian y aparecen necesidades nuevas. En estos 12 años lo que más evolucionó fue el asociacionismo. Cuando empecé había pocas asociaciones sociales, que son las que defienden los derechos de los colectivos, son las que representan a la gente.

¿Le ayudó su formación como educadora social?
Al empezar tenía una base, la que da la formación universitaria. En Servizos Sociais aprendí muchísimo. Sobre todo de los técnicos y a nivel profesional. Al finalizar la carrera, tienes muchos conocimientos pero te faltan los que da la experiencia profesional. También tomé contacto con la administración. Un educador social puede abarcar la educación familiar, formación, tercera edad o menores, entre otros campos. El ámbito que más me gustó es la tercera edad, pues es lo que mejor se me da. Me gusta conectar con los mayores porque aportan muchísimo. ¡Tienes tanto que aprender de ellos! Te aportan valores.

¿Afectó la crisis a O Barco?
O Barco es un oasis. Se notó la crisis, pero no como en otras villas. Se notó mucho en la población inmigrante, que superó ampliamente el 9 % del total de habitantes (ahora está por debajo del 8 %). Vino porque había trabajo y con la crisis bajó mucho. También se notó en las familias, parejas con hijos, que no trabajan, o en familias monoparentales, de una sola persona, que se quedaron sin trabajo. Eso sí, funcionan muy bien las asociaciones como Cáritas o Cruz Roja. Estamos bien protegidos.

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