Una parte de los residuos será transportada al nuevo, para permitir la regeneración del recinto
Una inversión de 469.883 euros permitirá el sellado y posterior regeneración del recinto del antiguo vertedero de A Rúa. El Consello de la Xunta autorizó ayer la colaboración de la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras y el Concello de A Rúa para clausurarlo definitivamente. Su estado actual, con residuos que amenazan caer sobre el acceso y con la malla de cierre rota en algunos puntos preocupa al equipo de gobierno que dirige Avelino García Ferradal, quien solicitó su sellado en varias ocasiones.
"O obxectivo desta actuación é evitar a vertedura incontrolada de residuos, ao tempo que se reducen os potenciais riscos para a saúde pública, a paisaxe e o medio ambiente", afirmaron fuentes del Ejecutivo autonómico. Añadieron que esta actuación permitirá regenerar la zona afectada para integrarla nuevamente en el medio. Situado a escasos metros de la carretera OU-933, que comunica la localidfad de A Rúa con Roblido, ocupa una superficie total de 8.812 metros cuadrados, dentro de una parcela municipal de aproximadamente 15.000 metros cuadrados de superficie.
La capacidad de estas instalaciones está totalmente agotada y llevan tiempo cerradas. Su clausura será realizada siguiendo la normativa de seguridad ambiental que recoge el Real decreto 1481/2001, de 27 de diciembre. El proyecto de sellado contempla el transporte de parte de los residuos al nuevo vertedero de inertes, construido por la Xunta de Galicia en 2010 a escasos 600 metros del antiguo. Fue incluido en el Plan para construcción de vertederos para residuos de la construcción y demolición. El sellado del vertedero de A Rúa constituye una recuperación ambiental del espacio que ocupa y de su entorno. Las acciones más destacadas son la retirada de voluminosos y la recolocación de residuos y la recuperación del terreno.
