El Pleno lo despidió con una ovación, tras admitir su renuncia para presidir el Consello Regulador
Bastaron 15 minutos para que el Pleno de la Corporación Municipal de A Rúa despidiese al concejal independiente José Vicente Solarat López. Se llevó una ovación como último recuerdo de sus 32 años de participación en la vida política local, labor que desarrolló ocupando el cargo de alcalde durante 18 años y como concejal los restantes. La sesión fue breve, pero bastó para permitir apreciar el aprecio y estima que todos los ediles tienen al próximo presidente del Consello Regulador de la Denominación de Orixe Valdeorras. Su elección para esta presidencia fue el único motivo que le llevó a adelantar su despedida de la política activa, que hasta hace escasas semanas había programado para el final de la legislatura.
En su despedida, José Vicente Solarat aludió a las personaldiades que ocuparon la Alcaldía durante su periplo en la política ruesa. Desde Cosme López -que "fue el primer alcalde al que tuve el honor de ayudar", según dijo-, hasta el actual, Avelino García, pasando por Emiliano Quiroga, José Antonio Míguez y Luis Fernández Gudiña.
"Este tiempo lo pasé en un ambiente cordial y de eficacia de los trabajadores", dijo el ya exconcejal. Inmediatamente, pasó a referir una larga relación de nombres de los trabajadores que coincidieron con él, en la etapa política a la que ayer dijo adiós. "Hoy, en el Concello, hay un equipo difícilmente superable", afirmó rotundo Solarat. Eso sí, no se olvidó de aludir a la secretaria municipal que lo llevó al Juzgado en 2004. "No todo el mundo ha tenido la fortuna de desempeñar el puesto de Secretaría con amabilidad", dijo, si bien eludió nombrar a la funcionaria. Momentos después se despedía de los asistentes con un deseo: "Celebrar acontecimientos felices con un buen valdeorras".
A su vez, el alcalde popular, visiblemente emocionado, agradeció la labor desempeñada por José Vicente Solarat y anunció que este mismo desempeño será recompensado con un "reconocimiento" del Concello. También agradecieron su labor la socialista Ana Fernández y la nacionalista María González.
