La Xunta planteó su cierre por las irregularidades en el funcionamiento
La Corporación municipal de Trives, que preside el independiente Francisco José Fernández Blanco, acordó ayer instar a la Xunta para que garantice el correcto funcionamiento de la residencia de ancianos y evitar así su cierre. La sesión plenaria se desarrolló en un ambiente bronco, que finalizó con el desalojo del presidente en funciones de la Mancomunidade das Terras do Navea-Bibei, Manuel José Vicente de Inés, después de que este se dirigiese desde el público al alcalde, afirmando que sus explicaciones eran mentira.
El alcalde convocó el pleno para informar de la situación en que se encuentran la residencia de ancianos y la entidad que la gestiona: la Mancomunidade das Terras do Navea-Bibei. Francisco José Fernández dijo haber informado a Rogelio Martínez y a Marisol Díaz, cuando esta lo sustituyó al frente de la jefatura provincial de la Xunta, de las irregularidades detectadas en el funcionamiento del geriátrico. Habló de las que observó el Concello y de las que pusieron en su conocimiento las familias y los facultativos del Hospital Valdeorras y del PAC trivés.
Francisco José Fernández habló de "graves deterioros" y aludió al "estado higiénico y médico" de los internos. Explicó que el Concello impidió que el Consello de la Xunta aprobase el cierre de la residencia, en la que trabajan más de 30 personas y que atiende a 60 internos. El cierre fue propuesto por la Consellería de Política Social ante los reiterados incumplimientos que acumula desde 2013 y ocho faltas graves. Una nueva inspección decidirá si puede seguir abierta.
