A Veiga reunió a 15 equipos gallegos y asturianos y a casi 150 deportistas en su Grand Prix, un concurso en el que los participantes debieron correr sobre las zamburguesas del embalse y compartir esquís, entre otras 19 pruebas.
Los competidores del Grand Prix Race Edition de A Veiga sin duda agradecieron la prueba de las zamburguesas. Colocadas sobre las aguas del embalse de Prada, permitieron a los concursantes darse algún que otro chapuzón, refrescándose en la calurosa tarde de ayer. Fueron 21 las pruebas incluidas en el recorrido de la primera edición de un concurso organizado por Qualité Sport en colaboración con la Deputación Provincial, que busca combinar "deporte, diversión y turismo", según la explicación del alcalde: Juan Anta Rodríguez.
"¡Impresionante!". Este calificativo fue el elegido por una componente del equipo "Espartanos Ourensanos", nada más finalizar el recorrido de cinco kilómetros, sembrado de dificultados. Salió de esta competidora anunciar que volverá a desplazarse hasta A Veiga para competir en la próxima edición del concurso. Este entusiasmo ya se vivió momentos antes de iniciar la competición. "Venimos para pasarlo bien", comentaba un integrante del equipo rues, Rafael Fernández. "Somos asiduos a las carreras de obstáculos y para una que hay en la provincia, aquí estamos. Venimos para pasarlo bien y disfrutar", dijo "Witch", competidora de Espartanos Ourensanos.
Este mismo fin, pasar un rato divertido, arrastró ayer a una quincena de equipos y casi 150 participantes hasta el Concello de A Veiga. El circuito de cinco kilómetros, trazado entre la Praza do Concello y la Praia dos Franceses, reunió a competidores de A Rúa, Ourense, Verín, O Barco, Pontevedra, O Bolo, Avilés (Asturias), Viana, Cangas do Morrazo (Pontevedra) y del Concello anfitrión.
Mantener una forma física aceptable y ganas de divertirse fueron los dos únicos requisitos exigidos para competir y los participantes mostraron sobradas dosis de ellos. Ante paredes de madera que harían dar la vuelta a otros, ellos las superaron valiéndose de la labor de equipo. También las pruebas de ingenio. "En una competición. ¿Qué puesto ocupa el que va detrás del último?", fue una de ellas. También hubo recorridos en sacos en los que cabe una familia y desplazamientos de parejas o tríos sobre esquís.
Durante el Grand Prix, el público se desplazó de un escenario a otro, si bien mostró preferencia por la prueba de las "zamburguesas" en las aguas del embalse de Prada. En este tipo de competición, el resultado no es lo más importante, pero también conviene decir que ganaron Los Vengadores de Pontevedra, formado por soldados de la Brilat. En A Veiga hicieron valer su excelente preparación.
