MANUAL URGENTE DE OURENSANISMO

La bica como argumento identitario

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En un nuevo Ourense independiente, la bica sería la bandera, la fiesta nacional, la reina, y la poción mágica contra los malvados invasores.

Determinación, ya. Ourense tiene la bica. Es decir, tiene todo lo que se necesita para declarar su independencia. Un lugar puede independizarse cuando tiene comida suficiente como para aguantar la resistencia, el hambre, y el aislamiento internacional. 
De ser Artur Mas ourensano, resultaría un tipo más coñazo de lo que ya es, y sería un milagro porque Mas, el Ulises de Joyce, y Valdano, compiten en la densidad de su ser, siempre en la necesidad de expresar algo trascendente, incluso para indicar que se están haciendo pis. Mientras un tipo normal exclama “me hago pis”, una persona educada comenta “tal vez me estén esperando fuera”, Joyce necesita un millón de párrafos para decir que quiere ir al baño, Mas dirá: “Como parte de la deuda histórica que el mundo tiene con las necesidades básicas de los catalanes, y atendiendo a la urgencia de la situación que me concierne, en tanto en cuanto -expresión, por cierto, que señaliza a un gilipollas en cualquier parte del mundo- mi vejiga se está viendo oprimida por el estado español, exijo mi derecho histórico a mear”. Por su parte, cuando todos los anteriores hayan terminado, Valdano estará aún comenzando la primera de las subordinadas. 

Tenemos argumentos mucho más sólidos, mullidos, y sabrosos que otros para autodeterminarnos, o como se diga ahora eso de separarse del mundo. Damas y caballeros: tenemos la bica. Con mucho menos, Roma fue Roma, Grecia fue Grecia, y Teruel fue Teruel. 

SEÑA DE IDENTIDAD

Dos son los derivados del bizcocho tradicional que han logrado conquistar mi corazón. Uno es el mármol, supongo que de influencia americana, como casi todo lo que mi médico no quiere que coma. Y el otro es la bica, cuya finura compite con su poderío identitario, el mismo que me permite hoy pedir a los pasteleros que se echen a las calles, armados con sus bizcochos, y reclamen su nuevo estatus. 

En un nuevo Ourense independiente, la bica sería la bandera, la fiesta nacional, la reina, y la poción mágica contra los malvados invasores. Es tal el arraigo que mis acogedores ourensanos me han transmitido sobre el valor cultural de la bica, que ayer tras probar un bocado de este delicioso postre por la calle, me crucé con un tipo de Lugo y lo increpé por extranjero e invasor. Luego vi que estaba haciendo cola para comprar bica y acabamos llevándonos bien. Seguro que, como yo, tiene manteca y huevos en el RH. 

LA HORA IDEAL

El resto del planeta funciona con horarios muy extraños. La mayoría creen que solo se pueden tomar cosas dulces después de las comidas, y es una estupidez, porque justo después de comer no se tiene hambre. No tiene sentido dejar los bombones y pasteles para la hora en la que no se tiene apetito. De nuevo, la tradición ourensana ha sabido resolver esta secular anomalía: la bica no computa como postre. Así, libre de ataduras y convenciones absurdas, puede comerse a todas horas. En un día bueno puedes desayunar, comer y cenar bica. Estarás perfectamente alimentado. Mi teoría es que lo rico no engorda. Mi compadre Quero siempre apostilla que lo verde, en cambio, engorda una barbaridad, que no hay más que ver cómo están las vacas. 
De modo que cualquier hora es buena para tomar un trocito de bica, acompañada de lo que sea. Siéntete libre, como decimos los de Nueva York. No necesitas una excusa para comerte la bica entera y empezar la siguiente.

VARIEDADES

Con el sucio objetivo de desarmar nuestra unidad, los agentes secretos del Estado opresor están tratando de dividir a nuestro ejército inoculando multitud de variantes de la bica original y tradicional. Divide y vencerás. De esta manera, muchas localidades de la provincia presumen ya de diferentes tipos de bica, con matices identitarios que hacen muy complicada la convivencia nacional. El enfrentamiento por encontrar la mejor bica podría llevar a dos pueblos, hermanos nuestros, a alzarse en bicas y entrar en una guerra sin cuartel hasta la cocina.

Tiene la bica suficiente poderío nacional para aunar todas las sensibilidades bajo una misma Constitución Postrera -de postre, no de posterior-, y no es necesario liarse a huevazos y sacos de harina por este asunto. No obstante, con el fin de evitar el enfrentamiento, la nueva Constitución de Ourense acogerá esta receta que he elaborado con sumo cariño, tras consultar a mis maestros pasteleros locales. 

LA RECETA CONSTITUCIONAL

Para una bica de tamaño medio se necesitan 3.000 kilos de manteca de vaca -si prefieres mete la vaca entera en el horno y además de la bica tendrás carne asada para la cena-, 6.000 kilos de azúcar o diez discos de Celia Cruz, 500 kilos de fermento -esto no se vende pero supongo que podrás comprarlo en la Internet Oscura-, 80 huevos medianos, ralladura de diez limones, y treinta kilos de canela. 

Consejo: la canela pesa muy poco, así que es imposible reunir más de un kilo en una báscula sin que se escape volando y te haga estornudar. Echa toda la que puedas antes de que te sobrevenga el gran estornudo. No te asustes si después acaba esparcida por toda la casa. Puedes aspirarla. Cada bolsita de aspiradora llena de canela equivale a tres kilos. Llena tantos aspiradores como quieras porque, total, es para espolvorear por encima, así que si te pasas de cantidad solo tendrás que meter la bica un rato debajo del ventilador. 

La bica perfecta requiere también harina -echa con alegría, no creo que uno pueda quedarse corto de algo tan básico-, levadura muy extraña, y agua, que es un líquido muy parecido a la cerveza que todos tenemos en casa, pero sin burbujas y transparente. 

Mete todo eso en el horno hasta que te des cuenta de que has olvidado la levadura. Entonces, si lo has hecho bien, quizá tengas torrijas. ¡Bravo! Oye, y la levadura rara que necesitas para hacer la bica, es fresca, y solo se vende en panaderías. Así que cuando bajes a por el pan, pide también levadura. Y por supuesto, no olvides comprar la bica. ¿De verdad pensabas hacerla en casa? 

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