Consagrada entre las clásicas, nació para sustituir a Mundo Noche tras un trágico accidente de tráfico
Ciudad Cristal nació como orquesta en el contexto de una situación trágica: el accidente que ocasionó la muerte de varios componentes de la orquesta viguesa Mundo Noche y que les privó de cumplir los compromisos que tenían adquiridos en fiestas y galas durante aquel verano de 1988. Con el fin de no dejar sin música esas fiestas previamente concertadas por la orquesta viguesa, se organizó de manera inmediata una orquesta alternativa, de manos de Lito García, que la montó con un grupo de músicos conocidos suyos.
Esa situación "para salir del paso" dio lugar, a la vista de la buena acogida, a la creación de la orquesta Ciudad Cristal, que comenzó su andadura oficial en la noche de fin de año de 1988.
Comenzaron siendo una orquesta de diez componentes, con una voz masculina. Hoy día la orquesta cuenta con un potente equipo vocal formado por dos voces femeninas, Patricia Brea y Lucía Nieto -quien es la presentadora y la responsable del vestuario-, y dos masculinas: Roberto Barrios y Ángel Moreira. De la sección rítmica se ocupan, Ale Casqueiro, quien además es director musical y arreglista;Luis A. Villota, que toca la batería; Alberto Rial, al bajo, y José Luis Díaz, al bajo.
En la sección de metal están Manuel A. Vázquez, trombonista; Martín Prieto, trompetista; Jorge García, saxofonista y Mikel Rojo, trompetista, arreglista, director musical y ayudante de teclados.
Con todos ellos sigue Lito García, fundador de la orquesta que ha dejado el escenario para ponerse a los mandos del equipo como técnico de sonido y de montaje.
Cuentan con un repertorio de amplia gama, que comienza con los ritmos clásicos de baile y los latinos para calentar motores con el público más veterano y un amplio catálogo de temas de rabiosa actualidad para animar a los más jóvenes de la fiesta.
Sus giras son por toda Galicia, aunque también tocan localidades de otros puntos del noroeste español, con una media de galas que va de los 100 a 170 actuaciones por año. Con más de veinticinco años de historia, los componentes de la orquesta Ciudad Cristal podrían escribir un libro con las anécdotas que han acumulado en todo este tiempo. Lito recuerda, por ejemplo, un día que no aparecía el mando a distancia de subir y bajar el telón del escenario, "y después de mucho buscar lo encontramos dentro de uno de los zapatos del batería que se encontraba en uno de los camerinos".
La vida en la carretera hace que muchas veces tengan que enfrentarse a situaciones como la de buscar hotel donde dormir y, en plena temporada alta, no encontrar habitacion para todos y tener que dormir tres en una cama. Situaciones que se llevan cuando, como es el caso, hay compañerismo. La orquesta es "la otra familia".
