TRADICIÓN

San Roque por auga... y tierra

Los vecinos de Castrelo de Miño pusieron el punto final a las fiestas patronales de la Asunción y San Roque de Cortiñas con la tradicional procesión de los santos en barca por las aguas del embalse del río Miño, con acompañamiento musical

Los festejos en la honra de la Virgen de la Asunción y de San Roque finalizaron ayer en Cortiñas, núcleo situado junto a la capitalidad municipal de Castrelo de Miño. La charanga Sorcha fue la encargada de recorrer las calles de la localidad anunciando la alborada a primeras horas de la mañana, como paso previo a la celebración, al mediodía, de la tradicional procesión fluvial. 

Los vecinos trasladaron la efigie de San Roque al catamarán municipal, que surcó las aguas del embalse de Castrelo de Miño desde el pantalán del Parque Náutico de Castrelo, con el acompañamiento de varias embarcaciones, reservándose una de ellas para la citada agrupación musical, mientras se realizaba el lanzamiento de fuegos de artificio desde tierra firme. Una vez que las barcas regresaron, fue oficiada una misa solemne en la propia explanada del complejo deportivo y un acto de reconocimiento a uno de los veteranos promotores de las fiestas. 

Ya por la noche, tendría lugar la última oportunidad para la degustación de codorniz, tanto a la brasa como en empanada con pan y vino de O Ribeiro en Cortiñas, que fue amenizada por la orquesta Alcázar.

La festividad de San Roque es conocida en la provincia y también se celebró en la ciudad de Ourense, con una procesión que recorrió las principales calles del casco antiguo, con salida y llegada desde la Catedral.

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