Una vez organizada la mesa es importante saber como utilizar de forma adecuada todos los utensilios que hemos dispuesto
Una vez organizada la mesa es importante saber como utilizar de forma adecuada todos los utensilios que hemos dispuesto, esto nos posibilitará desenvolvernos con educada corrección en cualquiera de las múltiples ocasiones que se nos presenten a lo largo de nuestra vida (social y mas tarde laboral).
Voy a comenzar por lo obvio. En el artículo anterior sobre la mesa no he mencionado los palillos y otros utensilios, porque son objetos que bajo ningún concepto se pondrán en la mesa, ni se utilizarán jamás en público y menos durante una comida. El palillo es a la mesa, lo que el chándal a las reuniones sociales, así de la misma forma que sucede con esta prenda que algunos consideran un comodín indispensable de su fondo de armario, vemos a personas paseándose con un palillo en la boca como si formara parte de su propia fisonomía, con el orgullo con que el pirata exibe su rutilante diente de oro. Otras personas, quizá entendiendo que es una norma de educación, tapan sus bocas mientras proceden con estos objetos. ¨Esto es del todo incorrecto¨
Librémonos pues de estas falsas interpretaciones de lo que es educado. Si en algún momento tenemos un problema de este tipo que no pueda esperar al final de la comida, nos levantaremos de la mesa de forma discreta, y pidiendo disculpas nos dirigiremos al aseo para solucionarlo; una vez resuelto volveremos a ocupar nuestro lugar sin dar demasiadas explicaciones. De idéntica forma procederemos si nos da un ataque de tos que no podemos controlar, una espina que se nos resiste, una mancha en nuestro atuendo o cualquier otro problema de esta índole que tengamos que solucionar sin demora.
Si en el transcurso de la comida se nos cae un cubierto al suelo, en casa de nuestros amigos lo recogeremos y se lo haremos saber a nuestros anfitriones para que nos lo cambien; si esto sucede en un restaurante se lo comunicaremos al camarero, este profesional se ocupará de recogerlo y ponernos uno limpio.
En cuanto al ¨que aproveche¨, expresión popularmente extendida como saludo durante una comida, se considera vulgar y ordinario en determinados ambientes refinados por lo que es preferible prescindir de ello antes de que se convierta para nosotros en una muletilla de errónea educación.
