El equipo ourensano está obligado a ganar en el Pazo (18:00 horas) al Oviedo para no quedar eliminado en el play off de ascenso a la Liga ACB
La eliminatoria que enfrenta al COB y al Oviedo entra en su momento decisivo. Tras el triunfo asturiano el viernes en el Pazo, los de Carles Marco tienen la primera oportunidad de resolver la serie. El COB se ha quedado sin margen de error y tiene que ganar para prolongar la eliminatoria hasta el martes.
Le tocó al cuerpo técnico del COB hacer terapia psicológica y a la vez análisis táctico. Cuesta decidir cual de las dos facetas cobra más protagonismo en un momento de la eliminatoria en el que le rival se ha mostrado tan superior.
Los ourensanos tienen que reinventar su repertorio para encontrar el camino al aro. Llevan siete cuartos consecutivos a merced de un Oviedo que lo ha minimizado. Sin puntos en el perímetro el COB se diluye. Christian Díaz, Diego Kapelan o Nemanja Mitrovic han desaparecido y Dmitry Flis y Kyle Hittle ni han aparecido.
El COB necesita recuperar a su batería perimetral para tener opciones. ¿Pero cómo? Desde la pizarra se antoja complicado cuando el trabajo semanal se derrumbó ya en la primera mitad. Pero sobretodo carece de sentido si los jugadores dejan de creer en sí mismos.
La plantilla del COB salió del Pazo totalmente hundida tras la derrota en el tercer partido y entró en el mismo recinto 19 horas después con la misma cara. Tras el entrenamiento de ayer eran otros.
Ayer el COB se fue a la cama pensando que volverá a ganar al Oviedo en el cuarto partido.
"No sé lo que pasará el martes pero mañana -por hoy- vamos a ganar. No tengo ninguna duda", decía tajante el entrenador del COB, Gonzalo García de Vitoria.
Y añadía la única clave que él considera: "Si llegamos al partido seguros de lo que tenemos que hacer y no tenemos miedos ni dudas, vamos a ganar. Si estamos convencidos, ganaremos".
Ánimos o confianzas al margen, el presente del COB deja todas las dudas posibles abiertas. Tiene que demostrarse a sí mismo que es capaz de competir y además sabe que lo hace sin red, pero también debería entender que aún así, la presión es para su rival.
El Oviedo sigue siendo el acaparador de la responsabilidad en esta eliminatoria. El COB debe recuperar la alegría de quién juega como premio a una gran temporada.
La presión y el miedo vendrá cuando dejen de jugar porque quizá esta tarde el COB, y no este equipo, esté jugando su últimos partido.
Paco Pazo, 18:00 horas.
