El Río Ourense Termal bajó el telón de la pretemporada y lo hizo con una victoria en el Pazo ante el Marín tras un partido que en si fue un buen resumen de lo visto hasta ahora. Un COB que apunta a fiable cuando equilibra el quintero y que avisa de un proceso de maduración obligatorio cuando van apareciendo muchos de sus relevos.
En la presentación en sociedad se puso el chándal de diario para empezar el partido y asentarse por delante en el marcador con la naturalidad del que sale a trotar por la mañana. Diez puntos arriba sin más que la superioridad cerca de la canasta de Rozitis y Watson (por este orden de aparición) y detalles puntuales del Sergio Rodríguez.
Pasó después al traje de oficina para finiquitar el partido y acercarse a lo que a estas alturas de la rutina podría ser su mejor versión. Vidal está un paso por delante del equipo y estaba varios por encima del rival. El base uruguayo anotó tres triples en cinco minutos que se suman a un dominio y lectura del juego incuestionable.
Con Ott y Rodríguez en el juego exterior el COB tuvo equilibrio y pegada. Tiro exterior, juego vertical al aro y defensa. El norteamericano deja una permanente sensación de hacerlo todo bien sin sobresalir en nada. Su firma desde que llegó a España. El canario lo tiene todo, pero en su caso el margen de crecimiento es obvio. Capaz de jugar bien alejado o próximo a la canasta y de anotar sin pedir protagonismo. Debe ser clave en este equipo y anotarse sin demora a la lista de los notables en esta liga.
Van Wijk se olvidó un ratito de la ansiedad que parece generarle el aro y Watson firmó el expediente dominando las dos zonas con la misma suficiencia que lo hizo en los partidos anteriores. No distingue rivales. Suma y suma.
Minutos para pensar que este equipo puede ser competitivo en una LEB Oro en la que apuntan a serlo todos sus rivales. 27 puntos de ventaja y poco más de un cuarto por jugar.
El problema para el COB es que acabó con el pijama y en pantuflas. Despidió el partido con su peor versión y obligando a pensar solo en los minutos anteriores. Mala imagen si es con la saludas por primera vez al vecino recién llegado, pero no era el caso. Las de ayer en el Pazo eran todas caras conocidas .
Acabó el COB con un quinteto cruel para quienes lo componían. Con una línea exterior sin experiencia alguna en la LEB Oro (Masters, Stefanuto y Molins) y un juego interior sin tener en la aportación individual sin mejor virtud. Muratovic irá creciendo en la lectura del juego y su tiro depende de los buenos pases que reciba. Rozitis sigue siendo un finalizador aunque su cuerpo técnico aspira a que aumente su repertorio esta temporada. Un quintero de partido amistoso que no se repetirá en la liga. Todos válidos, pero inviables a la vez. Lo aprovechó el rival que minimizar daños en un partido que ni convence ni decepciona.
