Cartas al director

Las obras de la Calle Remedios

Los vecinos del barrio del Couto, en Ourense, sufrimos a diario los desperfectos de la calle Remedios, señaladamente en el tramo comprendido entre la confluencia de esta vía con las calles Castro Canseco y Greco.  

Estos desperfectos, que representan un peligro tanto para los peatones como para los automovilistas, se deben a unas obras que se realizaron en su día y que se han demostrado tan innecesarias como perjudiciales, ya que el firme de la calzada y las aceras estaban anteriormente en unas condiciones mucho mejores y ahora todos, peatones y conductores, nos exponemos a sufrir un percance que nadie quiere.  

Eso por no hablar de que la calle es ahora más estrecha, sin que nadie haya sabido anticipar el caos vial que se produce cada día cuando los camiones estacionan durante las maniobras de carga y descarga.  

Ahora ya nadie repara en esto, más allá de los vecinos y los usuarios de esta calle, pero podemos estar seguros de que, en cuanto se acerquen las elecciones municipales, todos se acordarán de este rincón de la ciudad y de tantos otros. Eso si alguien no sufre antes -Dios no lo quiera- un percance al caminar o circular por este rincón de Ourense.

Entonces diremos lo de siempre: "Se veía venir".  
Mientras tanto, seguiremos sufriendo pacientemente el estado de esta calle y sorteando unos obstáculos que no deberían estar ahí y que entrañan un peligro más que evidente. Y seguiremos pidiendo, en la esperanza de que alguien nos escuche, un remedio para la calle Remedios.