Cartas al director

OBITUARIO | Para mi mamá Rosario

Hoy es un día triste, hace un año que te fuiste de nuestro lado, "mami". 365 días que mi corazón llora en silencio porque ya no estás, me haces todavía mucha falta, a todos nos haces falta. ¡Qué difícil, mami, es seguir sin ti! Pero a la vez me siento feliz porque sé que disfrutaste la vida, eso sí, nunca sin soltarnos de la mano. Gracias por tus sonrisas, tus besos, cada caricia y cada gesto de amor que nos diste, todavía tan presente en la vida de todos, tú, nuestra alegría. Siempre me dejabas los labios marcados en la mejilla, nunca salías sin ellos pintados. ¡Qué presumida eras y cómo me encantaba que lo fueses y verte bien y feliz! Porque eras nuestra matriarca, la que tiraba siempre de nosotros todos sin pedir nada a cambio, solo nuestra felicidad. ¡Cómo disfrutabas yendo a bailar, o jugar a las cartas! ¡Qué bien lo pasabas en la playa con tu pamela tan presumida! Disfrutabas de todos los momentos de nuestros sábados de café, de los bombones que tanto te gustaban y de aquel banquito frente tu casa que ahora esta tan vacío, allí sentada, siempre feliz y sonriendo con palabras para grandes y pequeños. Mira si eres grande que todo el barrio te quiere, mami. ¡Cuántas cosas te dijimos antes de que te fueras! ¡Cuánto amor nos dejaste y cuánto te llevaste! Porque los mimos que nos distes, te los llevaste contigo, fuiste un regalo que ojalá pudiera seguir disfrutandote. Nos enseñaste lo que es el amor, el amor del bueno, el de verdad, amor de madre, estoy tan llena de momentos tuyos que están tan presentes como tu sonrisa ó esas palabras pícaras que nos decías. Mamá, gracias por enfrentar la enfermad y a pesar de estar malita disfrutabas cuando íbamos a comer fuera, eras feliz teniéndonos a todos a tu lado y cómo disfrutabas de tu biznieta, pena que fue poco pero todos nos encargaremos de que te recuerde. Donde estés, mamá linda, nunca vamos a olvidarte. Eres mi orgullo y este dolor por tu ausencia, mientras viva, estará mami, pero tengo el consuelo de haber tenido a la mejor mamá. Te echamos de menos, mamá Rosario.