Cartas al director

Gracias delegación diocesana de misiones

Hoy día 22 de julio se celebra el 39 encuentro con nuestros misioneros diocesanos. La razón de estos encuentros lleva la marca de fiesta, de amistad, de testimonios, de recuerdos, de inquietudes, soy testigo de ello desde sus orígenes.

Como viejo misionero quiero agradecer a la Delegación de Misiones de Ourense su constante simpatía, apoyo y valoración de la entrega de docenas de sus misioneros en países lejanos, llevando la alegría del Evangelio, el equipamiento social, acompañamiento, compartiendo sufrimientos y alegrías.

Gracias a estos misioneros que gastaron juventud e imaginación acompañando a sus hermanos hasta encontrarse sin fuerzas para continuar. Al ser conscientes de sus limitaciones han dejado espacio a los nativos para el relevo. Gracias viejos amigos de corazón joven.

Hoy muchos de ellos se sienten unidos a los que llaman sus pueblos, sus hermanos, con la oración y la amistad, otros descansan de sus fatigas y siguen bendiciendo desde el cielo.

Hoy sabemos que nuestra siembra ha dado sus frutos, ya que la gracia de Dios ha incrementado aquella siembra. Los que fueron nuestros alumnos hoy son sacerdotes y religiosas que están trabajando codo con codo con nosotros aquí. No sólo nos han reemplazado en la misión en sus tierras sino que hoy aceptamos agradecidos su presencia y trabajo en nuestras parroquias.

 La Delegación de Misiones de Ourense tiene nuestra gratitud por su cercanía a sus ancianos misioneros . Todos recordamos a Don Aurelio Grande, Don Rodicio, Don Adelino por su preocupación y gozo al recibirnos; gracias a la secretaria Doña Josefa, gracias al equipo de voluntarios/as.

 Ánimo y un abrazo a todos los que aún mantenéis la lámpara encendida en lugares lejanos. Habladnos de vuestras comunidades de fe.