Cartas al director

Descubrir y abrazar la lectura

El verano es ideal para descubrir la lectura. O para abrazarla definitivamen- te. doble posibilidad a la que contribuyen novelas para dedicarse a lo que en este periodo estival se califica como "el verano es tiempo para leer".

Siempre he creído (y hoy en día estoy aún más convencido de ello), que las historias literarias son el mejor medio para aprender ese elemento "incomprensible", alucinatorio, profundo, absurdo y felizmente sagrado al que llamamos vida.

A través de la literatura recuerdo un trau- ma de infancia en un rincón del alma, has- ta el punto de que olvido los innumerables estratos y los niveles de maravillas espirituales de nuestra vida cotidiana. admiro a los autores capaces de crear historias a partir de la realidad, de adentrarse tan profundamente en el terreno mundano.

Durante todo el año leo libros, pero en verano su lectura me absorbe el cerebro con mayor profundidad. tengo la impresión de caminar sobre el alambre, arriesgándome a caer a cada paso. existen escritores que me incitan poéticamente reafirmando mis intuiciones sobre la vida. algo muy difícil de hacer. algo tan delicado como una huella dactilar en arena seca un día de brisa.

Hoy he acabado de leer una novela de fantasmas y brujas. terminando de escribir estas líneas se me ha estropeado la máquina de escribir. la literatura es pura magia para la mente. Y en verano mucho más.