Cartas al director

Terrorismo y cine

El terrorismo es desgraciadamente una de las plagas que padece nuestra sociedad, pues surgió tras la Segunda Guerra Mundial a raíz de la tecnificación de las armas, por un lado, y la existencia de colectivos extremistas y marginados, por otro lado. El cine, que siempre es un reflejo de la realidad, se ha hecho eco de este fenómeno, realizándose así mútiples películas cuyo argumento central gira en torno al terrorismo. La traslación a la pantalla grande de un hecho terrorista ocurrido realmente se puede ver en "21 horas en Múnich" (1976), película protagonizada por William Holden y Franco Nero, describiéndosse en ella la acción terrorista que tuvo lugar en los Juegos Olímpicos de Múnich contra la delegación de atletas de Israel por parte de una banda de guerrilleros palestinos.

En el filme "Domingo negro" (1976), un grupo terrorista palestino planea un brutal atentado durante la celebración de un partido de rugby. También existen largometrajes que, aunque no estén basados en un caso real, su argumento novelado parte de una situación que sí lo es.

Es el caso del filme "Chacal" (1973), sobre un hipotético atentado para asesinar al presidente francés Charles De Gaulle. Los atentados contra un jefe de estado y el secuestro de aviones o barcos son obviamente una fácil fuente argumental para esta clase de cine.

Así, tenemos en la retina títulos como "Alerta: misiles" (1976), "AlarmaX vuelo 502 secuestrado"(1972), "Aeropuerto 77" (1977). En definitiva, el subgénero de "terrorismo y cine", desde principios delos años setenta, ha reflejado con notable periodicidad en el panorama cinematográfico la presencia de este tremendo azote que supone para el mundo entero el terrorismo. Es un impulso del séptimo arte sobre terrorismo y cine...