El partido que empezó ganando el Outomuro acabó en empate (2-2), después de que el A Bola recortara distancias en el 89' y equilibrando el marcador en el 97'. Una falta en una contra propició una "trifulca" entre jugadores y aficionados
El partido entre el A Bola y el Outomuro, correspondiente a la jornada 13 del Grupo 9 de la Segunda Galicia terminó con empate a dos goles y con seis expulsados en los minutos de descuento donde hubo más que palabras.
El cambio por parte del Outomuro fue clave. Javier Saborido revolucionó al equipo visitante y marcó los dos goles de su equipo en el 78' y en el 85'. El 0-2 iluminaba el marcador y el A Bola quería remontar. En su ímpetu, recortó distancias en el minuto 89 (1-2) y ahí empezó el "otro partido". En una contra, el Outomuro cortó una contra de forma "dura" y el jugador del A Bola se revolvió y le "propinó un cabezazo" al infractor de la falta.
Y ahí se montó el quilombo. Fuentes del Outomuro, explican que "houbo zarandeos despois do cabezazo dun xogador do A Bola e intentamos separar o noso xogador dos outros rivais, pero chegou o dianteiro e empezou a facer puñetas e a insultar". Entre el tumulto, desde el A Bola, describen que "o cabezazo do noso xogador é inexcusable, pero despois saltaron tres aficionados do Outomuro e foron a por el. Tamén se acercou xente da grada para a zona onde se produciu".
Desde el Outomuro, explican que "o problema é que mandan a un árbitro de 18 anos a un campo de moita dificultade para arbitrar". Desde el A Bola, comentan que "é un rifirrafe destas categorías provinciais. Parece escandaloso polas seis expulsións".
