Medio millar de personas se reunieron en el Teleclub para degustar este producto del cerdo
La lluvia que cayó ayer con inssitencia sobre Valdeorras no restó asistencia a la última edición, y van 18, de la Festa da Freba de Petín. La carpa montada en las pistas del Teleclub protegió de las inclemencias meteorológicas a medio millar de personas, según los datos que maneja el Concello, organismo que organiza el evento y cuyo titular, Miguel Bautista Carballo, descartó elevar la capacidad por encima de los 500.
Los visitantes de la fiesta gastronómica que abre el calendario invernal de eventos gastronómicos organizados en torno al cerdo, en el oriente provincial, fueron atendidos por los propios vecinos. Los voluntarios no se quedaron sin cenar, siendo los primeros en probar los manjares preparados para la ocasión. Medio centenar de personas se ocupó de servir las mesas y también de asar la carne de cerdo, una labor que, al igual que en años anteriores, fue realizada utilizando grandes parrillas, colocadas en el interior del recinto. La proximidad permitió que el plato llegase caliente a los paladares de los comensales.
Fueron aproximadamente 220 los kilos de frebas servidos en la cena a un público que también saboreó unos 800 chorizos cocidos. Como entrante, el ya tradicional consomé, y para cerrar el menú un postre casero propio de la zona: la bica. No faltaron el vino y los licores, que fueron saboreados en las "cuncas" repartidas con las entradas, las cuales también dieron derecho a recoger una navaja como cubierto indispensable para cortar la carne de cerdo.
La fiesta no terminó cuando los asistentes dejaron de mover los carrillos. Inmediatamente, comenzó una sesión de baile, que animó la discoteca móvil Disco Stuu, con una sesión programada hasta altas horas de la madrugada. Su música evitó que el público pasase frío durante la noche, una circunstancia a la que también contribuyeron los equipos de calor colocados por el Concello.
