El acusado se personó en la casa de los abuelos de la hija que tienen en común
Marcos G.T. se enfrenta a nueve meses de prisión por un delito de quebrantamiento de condena al acercarse a su expareja cuando lo tenía prohibido por orden judicial.
Los hechos se remontan al mes de noviembre del 2016 cuando el acusado, según el ministerio fiscal, tuvo conocimiento de que su excompañera había trasladado a la hija que tienen en común a la casa de sus abuelos y se acercó al lugar en que se encontraba, en la avenida de Abdón Blanco de Celanova, para recriminarle la decisión y exigirle una explicación. Su expareja, al verle que venía hacia ella, puso en marcha su coche y, según la acusación se dio a la fuga. Marcos G.L. se sentó el pasado día 3 en el Juzgado de lo Penal y negó los hechos. El fiscal solicitó que le sea impuestos los nueve meses de prisión . El juicio quedó visto para sentencia.
