"Voute esnaquizar, miñoca" fue una de las citas célebres que dejó esta serie que conquistó a muchos niños a finales de los 80 y principios de los 90
La TVG tuvo en sus primeros años de existencia un papel fundamental en la difusión del Gallego. Para muchos niños de finales de los 80 y principios de los 90, Dragon Ball no sólo supuso una revolución por su contenido (la TVG fue la primera en emitirla en España, a finales de 1989), sino también un paso irreversible hacia la normalización lingüística. Fue tal el impacto de la serie (cualquier menor de 16 años sabía la canción principal y de cierre de memoria) que varios colegios y asociaciones del Principado de Asturias pidieron a la TVG rebajar la potencia de la señal en las zonas limítrofes, ya que los niños asturianos empezaron a utilizar frases tan míticas como la de Vegeta y su “voute esnaquizar, miñoca”. Dragon Ball y Dragon Ball Z fueron una cita ineludible a la hora de la merienda, con momentos inolvidables como la derrota de Piccolo Daimaku, la primera aparición de Chichi, la destrucción “en cinco minutos” del planeta Namec (que duró doce capítulos) o el reencuentro de SonGoku con su abuelo.