No es el COB más estético. Y lo entendemos. Comprendemos a su técnico, Gonzalo García de Vitoria, cuando se distancia de cualquier virtuosismo que pueda divergir con la conveniencia. Y lo conveniente es el esfuerzo y la aceleración. Por ahí suma sus triunfos el conjunto ourensano. El último ante un Barcelona al que le cuesta ver aro -aunque no tanto como los sufridos aficionados que pretendieron seguir el partido por FEBtv a los que se les privó de la visión de la canasta 'oeste'- y más aún le cuesta, al filial barcelonista, la defensa.
De la necesidad virtud. En ello coinciden un COB quizá más simétrico que lo puede ser Araberri -83% de los puntos para Hearst, Berhanemeskel, Cvtinovic y Papantoniou- o el Gipuzkoa de Fisac -siete jugadores y toda la paciencia del mundo- 'outsiders' a cualquier pronóstico, competiendo ante los pudientes Breogán, Palencia, Coruña...y hasta Lleida o Palma ahora que puede recuperar a sus extranjeros Mutankabir y Rogers.
