Opinión

Cuestión de atributos

Ocho y media de la tarde, Pazo de los Deportes y banquillo de lujo: Fran y Manuel Crujeiras, Clodomiro Montero –presidente en la ACB– Feijóo, Fran, como no Álex y completando la terna los hermanos Iván y Carlos -de Palas y con- secuentemente del Breogán- cuya presencia invitaba a la prudencia inicial en los comentarios, vamos, por aquello de que la "educación se trae de casa", que dice mi madre.

De repente Crujeiras júnior, entusiasmado, se dirige a su padre, "¡papá, papá... mira el número 20 del COB!" Primer sobresalto o quizá ¿premonición?. El número 20 no era otro que un Chase Fieler enfrascado en un individual 'concurso' de mates que a nadie pasó desapercibido: "Joder...va sobrado", asentía Crujeiras padre, que de esto entiende un poco, por carácter en su etapa como profesional del baloncesto y haber pasado por ellas.

Dirección orquestal a cargo del incansable DJ Tibu y comienza el espectáculo. Puesta en escena espectacular por parte ourensana, Fieler se gustó en la cancha y enamoró en las gradas incluso a los que lo disfrutaron por primera vez en toda la temporada. Duros en defensa e imponiendo su ritmo, provocando que el baloncesto del Breogán perdiera toda lógica, sin aportación de sus interiores, irregulares sus exteriores y una evidencia, Mamadou Samb que no es un tirador, aunque hay días que pueda parecerlo.

Primer parcial con final de lujo, con triple desde media cancha por parte de Fieler, y todo parecía estar encaminado. Para Crujeiras el COB había acertado al endurecer el partido "lo que facilita el ataque y te da moral cara el desarrollo del play off. Defensa, bien; ataque, mejor... y para Carlos, más reflexivo un enigmático "esto solo tiene una clave".

Más o menos las cosas continuaron por igual derrotero en la continuación. Hubo un momento en que parecía que el Breogán podía recuperarse, pero bastó que Rivero, comentara algo a la oreja del acelerado Álex Llorca para que los lucenses volvieran a perder el norte... ¡Y todo decidido! Vamos, qué no llevará pasado por estas el comedido Rivero, pues Llorca, a tenor de su reacción, parece que no.

Y como colofón, interpretaciones a cargo de los mejores solistas: didáctico 'posteo' de Rejón, vuelos de Fieler -"estoy flipando" que decía Crujeiras- , altruismo de Suka- Umu, bombardeos de Brothers y Martínez, defensa de Arco y minutos brillantes de quienes se siguen colando en la fiesta, Díaz y Geramipoor.

Y a todo esto Carlos que despeja nuestras dudas: "El COB ganó por huevos".

"El deporte -que decía Neil Simon- es el único entretenimiento que, no importa las veces que lo veas, nunca se sabe el final". En este caso la verdad es que a poco de comenzar el partido y a tenor de los 'atributos' y acierto mostrados por cada contendiente, era algo que se intuía. Si el COB buscaba ese momento oportuno para sorprender sin lugar a dudas fue este. 

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