Opinión

Bruselas se arma contra España

El ministro de Economía lo dijo, en el Congreso de los Diputados, a propósito de su comparecencia sobre el mal llamado "caso Soria", Luis De Guindos se refirió también a las consecuencias del bloqueo político: la Comisión Europea está decidida a congelar más de 1.300 millones de fondos estructurales que nos corresponderían para el año 2017. Eso sin contar el daño reputacional y de confianza que supondrá para nuestro país no poder presentar a tiempo los Presupuestos Generales del Estado y un Programa de Estabilidad en condiciones. El Gobierno en funciones viene advirtiendo de que la falta de gobierno tiene un coste evidente y no sólo por las cuestiones antes planteadas. La imposibilidad de legislar tiene multitud de consecuencias. Cierto que el lunes el presidente en funciones se mostró abierto a negociar con los demás partidos la forma de minimizar los daños que puede causar en las comunidades autónomas y pensionistas, entre otros, la prórroga de los presupuestos de 2016. Rajoy tendió la mano a los partidos para ver cómo se puede trasladar a las distintas comunidades las cifras de ingresos a cuenta, FLA y otras para que puedan desarrollar sus cuentas con el mayor acierto posible. Un asunto importante, puesto que de las comunidades dependen asuntos de la importancia de la educación, la sanidad o los asuntos sociales.

El Gobierno, tras los resultados de las elecciones del domingo en Galicia y en el País Vasco, no encuentra motivos para la esperanza. De hecho, las maniobras de Pedro Sánchez parecen acercarnos más a unas terceras elecciones que a una solución para la gobernabilidad de España. Parece que el hecho de que el PSOE se haya pegado un buen batacazo en estos comicios, otro, no va a cambiar al menos la posición de Sánchez de mantener el NO a la investidura de Rajoy. Muchas cosas tienen que pasar en el Comité Federal que los socialistas celebrarán el próximo sábado para que el camino a un gobierno quede despejado. Así que Rajoy, dadas las fechas, da casi por seguro que se prorrogarán los Presupuestos y las consecuencias ya las conoce todo el mundo, por más que puntualmente se pueda llegar a algún acuerdo que efectivamente minimice los daños. Ya muchos indicadores empiezan a torcerse por más que algunos no quieran verlo.

El próximo lunes, en audiencia abierta, la Comisión y el Parlamento europeos hablarán de la situación de España, de la imposibilidad de cumplir los compromisos en tiempo y forma y, por tanto, del reparto de los fondos estructurales. Mientras, el Gobierno de España trabaja para al menos aprobar la modificación del Impuesto de Sociedades que supondrá el adelanto de unos 6.000 millones y presentarse así ante sus socios. Veremos si se hace, si se llega a tiempo y se evita la pérdida de esos más de 1.300 millones de euros tan necesarios.

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