Opinión

Carta abierta a los votantes de todos los partidos

Han hecho bien los líderes locales del PSOE y del partido bagazo del BNG (Ourense en Común), en su reciente decisión de mantener al PP en la alcaldía, e impedir un gobierno conjunto con Democracia Ourensana (DO). Si yo fuese como ellos, haría lo mismo. Porque si yo antepusiese odios personales al programa electoral, si para mí fuese prioritario mantener los privilegios de los funcionarios del Concello, si me diese urticaria hablar de gestión y eficiencia, si yo defendiera dispendios en actos culturales públicos (sin público), si yo pensase así, créanme, tampoco le daría el mando a alguien de DO. Han sido coherentes.

Pero lo que no es coherente, lo que es criticable, lo que nos indica de qué gentuza estamos hablando, es el hecho de que tanto la cúpula socialista como la de la Marea, hubiesen engañado a 3 (de 6) concejales del PSOE, a 8 de DO y a miles de votantes, aceptando negociar durante 6 largas semanas un programa de mínimos (que incluso logramos consensuar), cuando esas cúpulas no tenían intención alguna de llevar a cabo la planeada moción de censura. La gente reclama que nos pongamos de acuerdo, y lo hicimos. ¿Cómo pueden decir que DO no es de fiar aquellos que una vez firmado un programa consensuado lo rompen? ¿Cómo pueden preferir el programa íntegro del PP, antes que desarrollar buena parte del suyo propio? ¿Cómo pueden llamarse de izquierdas, unos partidos que prefieren que gobierne el PP?

No siempre ocurre pero en política sucede, la frase evangélica “quien no está conmigo, está contra mí”, es cierta. En política sólo hay dos partes: gobierno y oposición. Simple lógica, quien tiene opción de impedir que alguien gobierne y no lo impide, lo está permitiendo (y viceversa); existe responsabilidad. Este mes el Concello de Ourense ha quedado perfectamente definido con dos bloques, por un lado PP y sus tontos útiles (PSOE-OUeC), y por otro lado DO, el único partido que es oposición real al PP.

Democracia Ourensana se ha convertido en el único voto del cambio, y lo ha hecho de forma ecléctica. Se nos han unido muchos ciudadanos, desde todos lados, lo cual significa que restamos votos a otros por todos lados. Por ello en las municipales de 2015, PP y PSOE tuvieron sus mínimos históricos (no podemos atribuirnos todo el mérito de finiquitar al BNG, hubo cierto trasvase de votos a su partido bagazo OUeC).

En las elecciones municipales de 2019 iremos a por la victoria, una victoria que signifique cambios en la ciudad. No será  fácil. Nos enfrentamos a un bloque de tres partidos que van juntos de la mano. Yo me pregunto qué pensarán en los próximos comicios los simpatizantes del PSOE y del partido bagazo, cuando sepan que sus papeletas podrían servir otra vez para mantener al PP en la alcaldía. ¿Qué pensarán en 2019 antes de escoger su papeleta? Parece que ya se les oye: 

-Hey, que me devuelvan el voto útil.

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