Opinión

Huyamos de las sirenas, sigamos en democracia

Sin lugar a dudas, y dentro del estado de bienestar que dicen que tenemos y que aún no hemos alcanzado en plenitud si tenemos en cuenta el tercer y cuarto mundo, tiene un coste al que debemos contribuir todos los ciudadanos. Hasta ahí no tengo nada que decir, pero estamos llegando a casos en los que se está obligando a las personas que realicen ciertas acciones o cambien sus actos para que tengan una vida mejor, y que solo a él le corresponde tomar. Descarto las que según los entendidos incrementan el coste sanitario, con los que perjudican a terceros, mas aquellos que solo le afectan a la persona y que le obligan a él van en contra de su libertad de decisión.

Quizás sea el momento de plantearnos si la democracia tal cómo se está aplicando es la correcta, o al contrario hay que cambiar antes que las demagógicas izquierdas y derechas que están surgiendo y triunfando acaben con ella. ¿Nos hemos olvidado de la libertad, igualdad, solidaridad? Ante los hechos que veo y la falta de diálogo pienso que cada día nos alejamos más y se nota que hay cierta imposición. 

No quiero pensar que sean los robots inteligentes que ya están cerca de la sabiduría los que nos sustituyan, quizás comandados por uno o varios demagogos que nos conduzcan al fin de la democracia y alcancemos "El mundo feliz” (“Brave New World”) de Aldous Huxley o "1984" de George Orwell. No me gustaría que sucediese nada de lo descrito. Quiero pensar que la humanidad reaccionará, y lo mismo que estamos preparados con la actual tecnología para evitar el impacto de un meteoro como el que terminó con los dinosaurios, puede aparecer un "Dave Bowman" como el que apagó a HAL9000, que muy posiblemente sea la propia ciudadanía la que actúe antes de sufrir la "vida sana" que nos propone la civilización democrática donde quieren que vayamos. 

Para ello la sociedad debe hacer suyo lo escrito por Ortega y Gasset en “La rebelión de las masas”: “Sólo cabe progresar cuando se piensa en grande, solo es posible avanzar cuando se mira lejos", con los partidos capaces de seguir incrementando la verdad, la libertad y la justicia, recuperando su coherencia acorde con las demandas de la ciudadanía, y que además consigan que seamos receptores de las plusvalías que genera el trabajo.

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