George Soros, el financiero que quebró el Banco de Inglaterra y hundió la libra esterlina en 1992, tiene una fundación, Open Society, que apoya en nombre de la democracia a ruidosos grupos de separatistas catalanes.
Dado que la fortuna de Soros se debe a la especulación financiera, con la que logró su fortuna estimada en unos 22.000 millones de euros, de los que donó casi 9.000 a su Fundación, a la que ahora va a sumarle 15.000 millones más, especulemos también nosotros acerca de su interés por una región española como posible fuente de beneficios.
Soros y muchos otros especuladores en los mercados financieros, inmobiliarios, o industriales, suelen multiplicar sus ingresos a través de las “Hedge Founds”, fondos altamente especulativos que prevén el hundimiento próximo de mercados o de empresas que compran cuando sus valores son mínimos y venden con enormes beneficios cuando recuperan parte o todo su valor. A veces sólo hay que darles unos empujoncitos para para acelerar su caída o ruina en los mercados a quienes se quiere comprar a precio de saldo.
Siguiendo con la especulación, ¿por qué no puede pensar que el derrumbe económico de Cataluña que está produciéndose, con huida acelerada de bancos y empresas, no se debe a una actividad especulativa? Cataluña como territorio rico está perdiendo en cuestión de días muchos miles de millones de euros, hay quien afirma que 100.000 millones, la mitad de su PIB hasta ahora, y todo lo que quede allí y no haya escapado habrá perdido parte de su valor. Miles de empresas, además boicoteadas por sus despechados clientes españoles, podrán adquirirse en saldos mientras siga degradándose la economía regional.
Cuando se normalice la situación política y recuperen algo su valor, aunque sea parcialmente, podrán venderse con grandes beneficios.
El cronista concluye su especulación: ¿Y si propulsando el separatismo alguien estuviera haciendo un monstruoso negocio?
